Autoridades federales y estatales tardarán al menos un mes en determinar si los restos de las víctimas mortales de la explosión en Tlahuelilpan, Hidalgo, son enviados al extranjero o se quedan en el país para su análisis e identificación.
Los peritos encontraron en la zona del siniestro 68 restos humanos, de los cuales 10 fueron identificados; de esos, ocho ya fueron entregados a sus familiares.
La tarde de ayer fue reconocido otro resto, por lo que faltan todavía 58 en ser identificados por sus familiares.
Luego de reunirse con familiares en el centro cultural de Tlahuelilpan, el procurador general de Justicia del estado, Raúl Arroyo, previó que no varíe esta cifra de restos, pues los trabajos de campo en la zona de la explosión ya concluyeron.
El titular de procuraduría local reveló que, “por la premura de los acontecimientos”, los restos se mantienen en la funeraria El Ángel, ubicada en Tula, “cada uno clasificado con un número y un procedimiento legal”.
Arroyo recordó que las condiciones en que se encuentran cada uno de los restos es diferente, pues van de la calcinación hasta la carbonización, y explicó que en un primer momento serán llevados a la Unidad Central Forense en Pachuca.
Abundó en que, una vez levantadas las actas de traslado, se tendrá que dar a conocer en qué lugar y condiciones se van a conservar los restos, además de que también se tiene que tomar en cuenta las condiciones legales, en particular la cadena de custodia.
“Ese traslado no lo podemos hacer precipitadamente, porque no estamos trasladando cosas, son restos humanos. No podemos tomar 60 bolsas y aventarlas en un tráiler, decir: ‘ya me las llevo en una camioneta’. Eso no es ni legal ni humanamente es posible”, enfatizó.
El procurador dijo que los casos de mayor complejidad para ser identificados y que no se puedan realizar los análisis en el país, se buscará apoyo en el extranjero, pero con dos condiciones: cercanía y calidad.
“La primera vista es hacia Estados Unidos o Canadá, quizá un país latinoamericano también pueda ofrecernos algo. Finalmente, ¿dónde están los laboratorios para los casos más complicados? En Europa. Pues eso lo tendremos que definir hasta el final”, subrayó.
Arroyo destacó que cuando se entreguen las muestras, cada laboratorio determinará el tiempo necesario para dar a conocer los resultados, por lo que enfatizó que será un proceso que tarde meses.
Sigue la búsqueda
Decenas de habitantes de Tlahuelilpan continuaron llegando al lugar del siniestro del viernes pasado para buscar posibles indicios de algún familiar.
Pese a que el área está acordonada y resguardada por elementos de la policías Federal y de Hidalgo, así como del Ejército, familiares y amigos conformaron brigadas y caminaron incluso por la zanja ocasionada por la explosión.
Algunos portaban guantes de plástico y otros más trajeron palas para buscar por su cuenta en el lugar donde todavía hay fuerte olor a combustible y en el pasto hay varias marcas de ceniza.
“Buscamos algún indicio, en el caso de mi hermano su ropa, sus zapatos de trabajo, algo que pudiera traer para poderlo identificar”, explicó Laura Cerón, familiar de una víctima.
Detectan otra fuga a 10 kilómetrosAutoridades federales y estatales detectaron una nueva fuga de combustible en uno de los ductos de Pemex en Hidalgo.
Mauricio Delmar, secretario de Seguridad estatal, confirmó que se trató de otra toma clandestina, en esta ocasión en el ducto Tula-Salamanca, ubicado en la comunidad de Teocalco, a unos 10 kilómetros de la toma clandestina en Tlahuelilpan.
La fuga ocurrió en un ducto que atraviesa un campo de cultivo en el ejido de Santa Ana, hasta donde llegó personal de Pemex para controlar el chorro que alcanzó hasta tres metros de altura. En este lugar, los pobladores no se acercaron a la zona.