El gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, inauguró una nueva planta de energía solar en la que se invirtieron 30 millones de dólares, lo que garantizará el suministro de electricidad a 30 mil hogares del estado.
Yucatán se consolida como un polo para la atracción de inversiones y el cuidado del medio ambiente, con la planta fotovoltaica de San Ignacio.
Mauricio Vila cortó el listón inaugural de este parque solar en el municipio de Progreso, el cual tiene una capacidad de potencia de 18 Megawatts y el cual contribuirá a atender la demanda energética del estado.
El gobernador señaló que los 18 Megawatts de capacidad de potencia que tiene el parque contribuyen de manera importante para cubrir la demanda energética de todo el estado, que es de 900 Megawatts en promedio, por lo que indicó que proyectos de este tipo que vengan a sumar a estos esfuerzos, serán apoyados por el gobierno de Yucatán.
El gobernador de Yucatán mencionó que en el tema de energías renovables en el estado, actualmente se cuenta con 24 proyectos de energías limpias, los cuales suman una capacidad de 3 mil 400 Megawatts y de concretarse representarían una inversión de 4 mil 500 millones de dólares.
“Si estos proyectos se concretan, en Yucatán se tendría una capacidad de potencia de 3 mil 400 Megawatts provenientes energías renovables. Yucatán consume 900 Megawatts, calculo nos van a llevar entre tres y cuatro años para contar con una capacidad de 3 mil 400 Megawatts de energías limpias, con lo que seríamos el único estado de la República que tendría autosuficiencia y más energía renovable de lo que estamos consumiendo”, dijo el gobernador.
Vila Dosal destacó que para el gobierno de Yucatán el tema de las energías renovables no solamente es una prioridad sino una necesidad, por lo que reiteró el completo apoyo de las autoridades estatales para que este tipo de proyectos salgan adelante.
“Con este tipo de acciones es como estamos colocando a Yucatán como un polo de inversiones; vamos a seguir saliendo a promover al estado en todo México y a nivel internacional , sobre todo, vamos a seguir haciendo de los proyectos de energías renovables una prioridad para el estado”, señaló.
Con una inversión de más de 30 millones de dólares, la nueva planta fotovoltaica San Ignacio contribuirá a la reducción de 25 mil 691 toneladas de emisiones de dióxido de carbono, a través de 69 mil 120 módulos de trina solar, 330 inversores de Huawei, mil 320 seguidores PV Hardware y seis transformadores Siemens, por lo que el estado reitera su vanguardia en generación de energías limpias y amigables con el entorno.
Durante la construcción de la planta se generaron 421 empleos; mientras que, para su operación se crearon cuatro permanentes y 20 ocasionales.