Dentro de una captación de agua prehispánica, fueron encontrados dos esqueletos de personas de origen maya, en la antigua ciudad de Ek´ Balam, conocida y admirada debido a lo espectacular de su Acrópolis.
Diego Prieto Hernández, director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), explicó que el chultún o depósito de agua, ubicado en la parte alta de la Acrópolis del lado este, donde se encuentran realizando los últimos trabajos de excavaciones y restauración fue donde encontraron la cámara.
Por motivos que aún se investigan, el origen del chultún es para almacenar agua pero, ahora fue utilizado como una cámara funeraria.
“Pero en este caso, este chultún, dejo de ser utilizado como tal, por alguna razón que habremos de investigar y se constituyó como un elemento funerario, como una especie de tumba de tiro o de cámara funeraria”, dijo el directivo.
Los arqueólogos Leticia Vargas de la Peña y Víctor Castillo Borges, Gilberto Dzul May e Isidro Ché Méndez, que trabajan en la ciudad maya, también conocida como “Jaguar Negro”, encontraron la cámara y se concentraron en la excavación y consolidación en el lado oriente de la Plaza Elevada este de la Acrópolis.
“Y a su interior encontramos, este altar, (…) una piedra circular a manera de altar sobre la cual se encontró una olla, dentro de lo cual, habría otra olla fragmentada, y una serie de elementos de piedra obsidiana”, detalló Prieto Hernández.
El depósito, en forma de campana, tiene un área de captación circular de 3 metros de diámetro en promedio, delimitada por un muro bajo de piedras, colocadas con doble vista, además tiene una pequeña escalinata de dos peldaños. El chultún cuenta con un diámetro promedio de 2.10 metros y una profundidad de 2.98 metros; y la entrada, 54 centímetros de diámetro.
Además, se localizaron dos esqueletos de personas, una mujer y un hombre, que los ha conservado el silencio y la obscuridad del lugar.
“Junto a este altar, se encontraron dos individuos, un entierro primario de una mujer en posición de encuito ventral, es decir, acostada boca abajo, que fue enterrada con una ligera capa de tierra y encima de la cual, se localizó los restos de un entierro secundario, es decir, los restos movidos de otro sitio, de un individuo muy probablemente del sexo masculino”, detalló el funcionario federal.
En el caso de la mujer, de acuerdo con los primeros análisis realizados, indican que ella habría tenido una edad avanzada y estatura de aproximadamente de un metro con 40 centímetros.
Mientras en el caso del hombre, con los estudios aplicados a un fémur, un húmero, la mandíbula y otros fragmentos que fueron imposibles de reconocer por su mal estado de conservación; sin embargo, se ha tratado de un hombre adulto.
Prieto Hernández señaló que se harán los estudios para conocer a detalle las características de ambos individuos y la secuencia ocupacional del chultún.
La ciudad, que tienen una serie de murallas, y se han encontrado nueve recintos habitacionales de elite, donde se conservaron parcialmente relieves estucados que representan captores y cautivos, mascarones, esteras, además de vestigios de pintura mural.
Asociados a este conjunto de cuartos, se hallaron dos depósitos artificiales para agua, uno en el extremo norte y otro en el sur; este último, denominado Chultún 2, fue convertido en un espacio ritual y depósito mortuorio, rellenado con una capa de tierra, escombro y piedras.
Sin embargo, no toda la zona arqueológica ha sido explorada, pues, hay dos pirámides cubiertas por vegetación, una a la izquierda y otra la derecha, frente al edificio de la Acrópolis, que cada una tienen un aproximado de 28 metros de altura.
MO