Enfermedades en la piel y ardor de ojos son los principales padecimientos que han adquirido los habitantes de las colonias Graciela Fernández, Obrera y Zaragoza, en Matamors, debido a que viven dentro de un cerco de basura, lugar en el que la gente acude a tirar todo tipo de desperdicios sin control alguno.
Leticia Ruvalcaba, vecina de La Obrera, expuso que a esos funcionarios los deberían señalar ante el Congreso del Estado.
"Más de 7 meses y ninguno de ellos está trabajando, nadie, llámese nadie, está al pendiente de las necesidades de esta ciudad, nada más tan siquiera en el tema de la basura por esta parte de Matamoros es un foco de infección", manifestó.
Aseguró que ella padece continuamente de ardor en los ojos, tipo conjuntivitis y además en determinadas horas, debido al calor, empieza a sentir náuseas por el fuerte olor, pues dice que entre los desechos hay animales muertos, que están expuestos a altas temperaturas.
De igual manera, sus hijos padecen de enfermedades de la piel y comezón.
"Es por tanta basura y porque el aire trae todo esa cochinada hasta acá y los niños son los que la llevan continuamente, les brotan ronchas y eso es porque estamos rodeados de cochinada".
Luis Felipe Sifuentes, presidente de la asociación de colonos de la colonia Graciela Fernández, expresó que es un grave problema el que viven por la contaminación.
"Es una pestilencia muy fuerte la que se siente en el ambiente, el aire trae estos olores todos los días e incluso hay momentos en que es tan cargado el olor que no aguantamos permanecer sentados afuera", expresó.
Señaló que a diario tiran de manera clandestina basura y para detenerlos debería servir la policía ecológica, la cual parece sólo esta asignada al área urbana.
"Como es eso, deberían recorrer las colonias de la periferia donde la tira de basura es diaria y sin control, para qué la quieren en el centro ahí podría controlarse de otra, forma, la verdad acá hace falta, esto es el colmo".
Cabe destacar que algunos habitantes de estos lugares culpan a Lizeth Inungaray, regidora y presidenta de la Comisión de Ecología y Sergio Alberto Luna, titular de la Dirección de Ecología, responsables de procurar a la población un ambiente saludable.