Hace más de 30 años del domicilio del escultor Pitágoras Lobato Covarrubias se robaron dos piezas, se trata de dos réplicas de silbatos ceremoniales de la cultura Huasteca, una fue localizada en exhibición en el Museo de Bellas Artes de Houston, Texas.
Platicó que se trata de una colección de 13 en total que en su momento esculpió su padre que ya murió años atrás. Tras haber ubicado el caracol procederá legalmente, para lograr que le devuelvan la pieza y se le pague lo correspondiente por la explotación.
Al indagar la manera en la que llegó al museo de la unión americana, le informaron que fue el ex director del Museo de Antropología de la Ciudad de México, Pedro Francisco Sánchez Nava, la persona que proporcionó lo anterior.
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“Demandar la devolución de la pieza que es de mi propiedad, de la autoría de mi padre. Pienso demandar el museo de Houston, Texas para que me devuelve mi pieza y no habré de mentir, también busco el hecho de que se me remunere por el uso y explotación de mi pieza por más de 20 años”.
Pitágoras Lobato advirtió que la demanda también va contra el Museo de Antropología, hizo el llamado al Instituto Nacional de Antropología e Historia para que se llegue a un diálogo a fin de recuperar la pieza.
Comentó que no es un caracol ceremonial original, por lo que incluso existe un fraude total por parte del Museo de Bellas Artes de Houston, ya que esta pieza está exhibida y catalogada como milenaria.
“Esto se va a hacer un poquito más grande, porque hablamos que el checador de la Ciudad de México es un fraude, porque dio por buena una pieza que no lo es. El Museo de Antropología de la Ciudad de México va a quedar mal porque de qué manera está haciendo llegar una pieza cuando no es auténtica, el INAH también porque tuvo que haber tenido conocimiento de esto y el Museo de Houston, Texas pues no sé qué posición va a tomar, pero se va a ofender”.
En su momento interpuso una denuncia formal pero en aquellos años no existía un archivo digital como hoy en día, por lo que ha sido muy complicado localizar el documento. Tiene en su poder una fotografía de la pieza que se encontraba en proceso, dijo que es imposible que el caracol de aproximadamente 50 centímetros se catalogue como histórico, ya que incluso la identifican en los 1 mil 500 años Antes de Cristo.
El escultor veracruzano reconoció que la demanda generará una controversia, ya que pudieran existir dudas sobre la autenticidad de las demás piezas que se exhiben en el Museo de Bellas Artes de Houston.
“Imagino que como institución importante dentro de la materia del arte debe de contar con un checador, una persona que se encargue de checar la autenticidad de las piezas. Si el checador del Museo de Houston, Texas dio por buena la pieza, si yo vengo y pongo en tela de juicio la autenticidad de la pieza pues se pone en tela de juicio las más de 7 mil piezas que tiene el museo de Houston. Es un fraude total” concluyó el escultor.
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yc