Con la llegada del huracán Beryl a la península de Yucatán, la estatua gigante de Poseidón, en Puerto Progreso, se volvió viral, y ahora es conocida internacionalmente; la gente no quiere que la quiten.
Fernando Balan Díaz, conocido como “Chapa”, fue uno de los encargados de fabricar e instalar en la costa la figura de tres metros de altura del dios griego de los mares, por encargo del ayuntamiento progreseño, con la intención de atraer más turistas.
Estatua de Poseidón en aguas mexicanas
Balan Díaz, fue contactado por Don Raúl, un contratista del ayuntamiento, para qué iniciará el proyecto en conjunto. Fernando, con 17 años de experiencia soldando barcos y grandes estructuras, comentó:
“Se va a poner un Poseidón acá en el agua. Yo en mi mente, la verdad, yo nunca me imaginé, yo en mi mente… ¿Cómo lo vamos a poner bajo el agua? ¿Será que lo vamos a armar afuera y luego lo vamos a material? (…) No, Chapa, vamos a meter los pilotes y tú vas a armar el cuadro bajo el agua”.
El primer reto fue montar los pilotes y soldarlos para luego colocar sobre ellos, en partes, la gran estatua; todo les tomó solo ocho días. "Chapa” se sintió complacido con el resultado de tres equipos de constructores, soldadores y fibreros, y ve la estatua de Poseidón sobresale de la “playa Esmeralda”.
Fernando Balan Díaz relató:
“Pues es algo que cuando tú lo ves ya terminado, jala, sí, qué padre, porque dije: participé. Yo nunca me imaginé que llegara a ser tendencia internacional (…) de hecho mi esposa me etiqueta. Yo había compartido las imágenes, pero mi esposa me etiquetó (…) y se hizo una tendencia”.
La gran figura en el mar tomó por sorpresa a los habitantes del puerto, que no estaban enterados del proyecto. Luego llegó Beryl y algunos afirmaron que era la furia de Chaac, dios maya del agua y la lluvia, indignado por la falta de respeto de haber puesto a un homólogo de otra mitología, pero Fernando no se ofende, y lo toma a broma.
“En el trabajo, voy al trabajo… ay, que por tu culpa esto, que por tu culpa el otro, que por tu culpa la lluvia, como todo, y la familia igual me anda fregando: ay, tienes que quitar tu estatua, que no sé qué (…) y te apuesto que si hubiera puesto un Chaac iban a buscarle pies para buscar qué decir”.
Aunque hay una demanda de amparo interpuesta por un hombre identificado como Carlos Orlando Pérez Zaldívar, mayahablante, ante un juzgado federal en Mérida para que la estatua de Poseidón sea retirada, “Chapa” no lo toma personal.
La demanda está basada con el argumento de que menoscaba su derecho a la preservación de su cultura maya. Además, la estatua fue clausurada por inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), por no contar con un estudio de impacto ambiental.
Balam Díaz agregó:
“Yo no le veo nada, o sea, significativo. Entonces yo pienso que todo lo que están haciendo es para llamar la atención. Si lo quitan o no, la verdad ya no es cuestión mía, es de las personas que decidan quitarlo”.
Habitantes de Progreso se rehúsan a que la quiten
Habitantes del puerto yucateco ven con “buenos ojos” la puesta de la estatua de Poseidón y consideran que será un error quitarla por un motivo ideológico o legal. Lorena Cupul, vecina del Progreso de Castro, dijo:
“Pues bastante bonita, que representa algo maravilloso del mar, yo no creo que deban de quitarla, debe permanecer para que el turismo durante el verano la pueda ver y disfrutar; es algo maravilloso, único aquí en la playa de Progreso".
Por su parte, la señora Violeta Suárez, consideró una exageración retirar la escultura:
“Está bien para el turismo, llama la atención, yo pienso que está bien y es pura babosada realmente quitarla, le da buena vista”.
EDD