La ola de calor que afecta a la Región Lagunera, aunado a la falta de lluvias son factores que propician la proliferación de plagas como la araña roja en el maíz forrajero.
La preocupación de los agricultores es que además lidian con la presencia del gusano cogollero en casi las cuatro mil hectáreas cultivadas de maíz forrajero en el actual Ciclo Agrícola y que apareció debido a la falta de heladas durante el periodo invernal principalmente.
Los campesinos están contrarrestando la presencia del gusano cogollero con aplicaciones de insecticidas, sin embargo temen que ante el clima seco empiece a presentarse la araña roja.
Lorenzo Ponce Díaz, secretario general de la Liga de Comunidades Agrarias de la Confederación Nacional Campesina (CNC), destacó que la plaga empieza a aparecer cuando el cultivo está más desarrollado, por el momento su crecimiento es de alrededor de un metro y aún no se observa la presencia de este ácaro.
Para Ponce Díaz la presencia del gusano cogollero deja en claro que habrá mermas en la cosecha de maíz forrajero, sin embargo aún desconocen una estimación, pues en caso de que no se presenten lluvias en los próximos días, aumenta la posibilidad de la presencia de la araña roja y con ello más pérdidas en la producción.
En este Ciclo Agrícola Primavera-Verano 2017-2018, aumentó la incidencia del gusano cogollero y si antes los agricultores tenían eficiencia con una aplicación de agroquímicos para su combate, en este año algunos productores tendrán que llevar a cabo dos o tres fumigaciones, cuya inversión se estima en alrededor de mil 200 pesos por hectárea.
Por otro lado mencionó que la Junta de Sanidad Vegetal no está entregando apoyos para contrarrestar los gastos que tendrá que realizar los productores.
“Ojalá que se puedan presentar lluvias pronto, para evitar la presencia de la araña roja”, expresó.
A diferencia del gusano cogollero, la araña roja no prolifera en todos los cultivos, pues aquellos que se riegan con agua de noria y dan sus auxilios a tiempo, la planta se estresa menos.