Las tradicionales posadas que realizan los vecinos del fraccionamiento del Bosque ubicado en Gómez Palacio, Durango, se caracterizan desde hace más de 40 años por la recreación que hacen del Nacimiento, en donde desde los más pequeños de la casa hasta abuelitos participan en la representación de la noche en la que María y José pidieron posada para dar a luz al niño Dios, conocida como Noche Buena.
Carmen Virgil, vecina del sector, contó que su madre inició con esta tradición hace 47 años y ahora participan tres generaciones; los hijos de quienes en ese entonces eran niños y que junto a sus padres comenzaron con este ritual.
Virgil explicó que desde que inició la tradición, solamente se ha suspendido en una ocasión y fue en el 2021 por la pandemia del covid-19.
“Las posadas nos vienen a unir a las familias de la comunidad. En aquel tiempo éramos poquitos y ahora ya somos muchos”, explicó
Realizan las nueve posadas
En las posadas del sector, que comienzan desde el 16 de diciembre, se visitan nueve casas de la zona en las que los peregrinos pasan la noche en donde los reciben y, al día siguiente, los vecinos se vuelven a reunir para realizar los tradicionales cánticos y pedir posada casa por casa hasta que les den posada. En el lugar se reza un rosario para posteriormente realizar una convivencia entre los vecinos y disfrutar de la fiestas decembrinas.
A pesar de ser nueve casas en las que se da posada, todas las familias participan pues cooperan para la compra de velas, piñatas y comida para la convivencia que procede al rosario.
Los vecinos del fraccionamiento del Bosque anhelan que la tradición se mantenga vigente a través de las siguientes generaciones, pues consideran es la representación viviente de las posadas tradicionales las cuales invitan a los creyentes a prepararse para la llegada del hijo de Dios a la Tierra.
Sgg