Archivan en el Senado petición de exhorto a la Comisión Nacional del Agua para anular un decreto de 1974 que limita concesiones de agua del río Soto La Marina y frena el desarrollo de una amplia región de Tamaulipas.
Como medida emergente ante el panorama de sequía, en una proposición con punto de acuerdo se planteaba exhortar a la dependencia a reconsiderar y revocar el decreto de 1974 que limita dichas concesiones. Se expuso la necesidad de evaluar las condiciones actuales y asegurar un acceso justo y equitativo al agua.
La propuesta fue formulada por el hoy senador con licencia, José Ramón Gómez Leal, quien expuso que tras el decreto del 10 de diciembre de 1974, las concesiones del río Soto la Marina fueron severamente restringidas, cuando antaño el agua fluía con libertad y el agua era abundante.
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“Este río se convirtió en un símbolo de la tenacidad de su gente frente a la volubilidad de la política. El cambio instaurado por decreto transformó el paisaje hídrico de Tamaulipas, marcando el comienzo de escasez y restricciones que aún perduran”, dijo Gómez Leal en su proposición presentada en el anterior periodo ordinario de sesiones.
El proyecto fue archivado porque conforme al numeral 5 del artículo 277 del Reglamento del Senado, “las proposiciones con punto de acuerdo que no sean dictaminadas dentro del periodo ordinario de sesiones en el que fueron presentadas, se tendrán por concluidas, cumpliéndose con los trámites de su proceso legislativo y se descargarán de los turnos correspondientes, y sus expedientes serán remitidos al Archivo Histórico y Memoria Legislativa para su resguardo”.
En su exposición de motivos, explicaba que a pesar de los esfuerzos realizados a finales del siglo 20 y principios del 21, incluyendo estudios y peticiones formales en 1997 y una solicitud de revocación del decreto en 2001, Tamaulipas no ha logrado revertir las limitaciones impuestas.
“Aunque se concedió un permiso limitado en 2002 para otorgar una disponibilidad de 727 millones de metros cúbicos de agua del río, no se aprovechan debido al decreto de veda existente y el agua fluye hasta desembocar en el Golfo de México”.
Gómez Leal subrayó que ahora nos encontramos ante un Tamaulipas en crisis, pues la sequía castiga a la mayor parte del territorio, y la presa Vicente Guerrero antes llena de vida, se encuentra en una situación precaria.
“Es una emergencia hídrica que reclama una respuesta inmediata y eficaz. Por ello se requiere cancelar tal decreto y efectuar una gestión adecuada del río Soto La Marina, lo que podría revitalizar las comunidades a lo largo de sus 165 kilómetros e impulsar la agricultura y la pesca, y reducir la dependencia de aguas subterráneas salinas”.
Apuntó que la cercanía del río a la presa Vicente Guerrero y a ciudades clave como Reynosa y Matamoros, subraya aún más el impacto. “Frente a la severidad de esta crisis, es una cuestión de justicia y equidad que se solicite a la Conagua reconsiderar el decreto que ha moldeado el destino hídrico de Tamaulipas”.
SJHN