El gobernador Héctor Astudillo Flores descartó una posible irrupción en Chilpancingo del Frente Unido de Policías Comunitarias del Estado de Guerrero.
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Las declaraciones de Astudillo surgen luego que el obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, declaró que el grupo de civiles armados incursionó en Xaltianguis con la intención de llegar a Chilpancingo a través de los pueblos del Valle de El Ocotito.
Rangel Mendoza también sostuvo que se trata de un grupo criminal, que pretende tomar el control de esta ruta para el traslado de droga y extender sus actividades delictivas.
El gobernador dijo que las corporaciones de seguridad adoptaron todas las "previsiones" tras la irrupción del Frente de Comunitarias en Xaltianguis el lunes 7 de mayo, donde murieron tres personas, así como varios vehículos baleados e incendiados.
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Astudillo Flores afirmó que el Grupo de Coordinación en materia de seguridad se encuentra "pendiente todos los días" respecto a este tipo de movimientos.
El jefe estatal también respondió a la propuesta del arzobispo Leopoldo González González, quien sugirió someter a consulta popular la permanencia de estos grupos de civiles armados que se asumen como policías comunitarias.
"Yo lo que creo es que el pueblo de Xaltianguis tiene que tomar determinaciones (...). La población debe tener un juicio más puntual de qué tanto le ha servido, o qué tanto le ha perjudicado esta confrontación entre dos grupos que han generado grandes conflictos", respondió el mandatario.
OMZI