Hace más de un año, habitantes de la localidad de Cuyuxtlahuac, en Alcozauca de Guerrero, localizaron "piedras" de tamaños y formas inusuales en los márgenes de un río. Tras una investigación, autoridades lograron aclarar que esas "rocas" son vestigios fosilizados de un gonfoterio, cuyo pariente vivo más cercano es el elefante.
Así lo corroboraron los investigadores Jorge Cervantes Martínez y Antonio Hermosillo Worley, del Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) Guerrero, quienes acudieron el 30 de mayo de 2023 al poblado, ubicado al este de la región de La Montaña, casi en la frontera entre Guerrero y Oaxaca.
"De acuerdo con los especialistas, tras el hallazgo inicial hecho por los pobladores, quienes recolectaron y resguardaron los restos, ya para entonces expuestos por el flujo del agua, se dio un primer aviso a la instructora en la comunidad del programa 'Sembrando Vida', quien, a su vez, lo notificó al Centro INAH Guerrero", indicó la dependencia en un comunicado.
Personal del instituto acudió y brindó una plática informativa a los habitantes, donde se abordó la importancia científica y patrimonial de este tipo de descubrimientos.
Fósiles corresponden a un gonfoterio de Cuvier
Posteriormente, los expertos realizaron un examen visual al material óseo recuperado: fragmentos de costillas, cuerpos vertebrales completos, una sección de rama mandibular con molares insertos, fragmentos de otros molares y dos segmentos de incisivos.
Una vez realizado el análisis, se concluyó que, por la morfología de los molares y los incisivos, los restos corresponden a un gonfoterio de Cuvier, especie que ha sido identificada desde el sur de Estados Unidos hasta Sudamérica y que alcanzaba entre 2.50 y 2.70 metros de altura.
¿De dónde vienen los gonfoterios?
Los gonfoterios fueron mamíferos de trompa prensil –emparentados con los elefantes actuales–, que migraron al continente americano desde Asia, cruzando el estrecho de Bering, alrededor de 23 millones de años antes de nuestra era, evolucionaron y se dispersaron por toda América.
La importancia de este hallazgo es que brinda el primer dato paleontológico que se tiene del gonfoterio de Cuvier para esta región del estado de Guerrero, lo cual es evidencia de que el mamífero tuvo un área de actividad mucho más extensa.
Con anterioridad, se han encontrado restos de gonfoterios en localidades guerrerenses como San Juan Unión (Taxco de Alarcón), Zumpango del Río (Eduardo Neri), Chichihualco (Leonardo Bravo), Ayahualulco (Chilapa de Álvarez), San Miguel Cuixapa Centro y Río San Marcos (Zapotitlán Tablas).
ROA