Iniciaba el año de 1999 y el caso del niño Carlos Armando Muñoz Valdez “Carlitos” consternó a propios y extraños en la región lagunera dado a la brutalidad de lo ocurrido. Su cuerpo sin vida fue encontrado con señales de violencia en un terreno baldío de la colonia Carolinas de Torreón, tan solo tenía nueve años de edad.
Era imposible que Carlitos imaginara que acudir al Centro de Inteligencia Artificial para elegir su regalo del día de Reyes Magos sería una decisión fatal, ya que el propietario de aquel centro de computación y videojuegos en la colonia San Isidro sería quien terminaría con su corta vida, Enrique Bousquets Casanova.
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Cuerpo de 'Carlitos' fue encontrado con huellas de violencia
De acuerdo a reportes periodísticos en ese entonces, el cuerpo del menor fue encontrado el sábado 2 de enero de 1999 en un predio ubicado entre el bulevar Manuel Ávila Camacho y la calle Cuautitlán, a un costado de una escuela de enfermería.
Jesús Sotomayor junior, del área de Homicidios del Ministerio Público, fue quien acudió al lugar para dar fe del crimen y reportó que el cadáver tenía huellas de estrangulamiento.
Las investigaciones corrieron a cargo del entonces procurador General de Justicia en el Estado, Ricardo Cisneros Hernández y el delegado de la PGJE Laguna I, Juan Francisco Woo Favela.
Pasaban los meses y el expediente del caso de Carlitos pasaba por diferentes manos de procuradores, jueces y fiscales. Desde Woo Favela y Rafael Rosales Díaz como coordinador del área de Homicidios, después terminó la administración estatal y fue nombrado Oscar Calderón Sánchez como Procurador General y nombró a Rosales Díaz como fiscal especial.
El principal sospechoso; Bousquets Casanova
Todo la sospecha se dirigía hacia Bousquets Casanova al ser el propietario del negocio en donde fue visto por última vez el menor en la colonia San Isidro, de acuerdo a la versión de Andrés, un amigo que acompañaba a Carlitos.
El caso fue consignado al Juzgado Segundo Penal, donde el Juez Pedro Limón Hernández en primera instancia negó la orden de aprehensión contra Enrique Bousquets, pero en segunda instancia, Jesús Sotomayor Garza, Magistrado del Segundo Tribunal Unitario giró la orden de aprehensión de nueva cuenta.
Sin embargo, la defensa de Bousquets, dirigida por Manuel Alberto Flores Arizpe, solicitó el amparo de la justicia federal quedando sin efecto la aprehensión. Finalmente, el procurador nombró a Juan García Chapa como fiscal especial en el caso y fue quien a última instancia solicitó la orden girada por María Luisa Valencia García, Jueza Tercero Penal.
Cinco años después se detuvo al homicida de 'Carlitos'
Tras cinco años de permanecer impune el asesinato de Carlitos e l 1 de septiembre del 2004 se detuvo al autor material en la ciudad de Barcelona, España, ciudad en la que se refugió mientras era investigado por homicidio calificado, y además por traficar pornografía infantil y por acoso.
Las investigaciones recabadas por García Chapa apuntaron a que Carlitos había sido asesinado alrededor del mediodía del 2 de enero en el local, todavía fue a comer a su casa y volvió al lugar del crimen, horas más tarde se reportó el hallazgo de un cuerpo sin vida.
En su momento comentó que durante las indagatorias se estableció que el criminal le vendía a los niños pornografía infantil, mediante lo cual se los llevaba a su negocio. De acuerdo a la necropsia de ley, el niño presentaba huellas de lesiones que presumen que el menor opuso resistencia al ataque.
Testimonio de la esposa de Bousquets, fue clave
Según el testimonio de la esposa de Bousquets, ese día notó extraño comportamiento de su marido, por la noche llegó sin hacer ruido maloliente y sin zapatos, además al siguiente día intentó vender su coche, versión determinante para la investigación.
Asimismo durante las investigaciones días después del crimen se conoció que un ex-agente del FBI, colaborador de la PGJE, le efectuó a Bousquets Casanova la prueba del detector de mentiras, en la cual falló el sospechoso. Misteriosamente dicha diligencia desapareció del expediente, pero después fue recuperada al contar con una copia en la procuraduría.
Sentencia insuficiente
Fue en el año 2006 que Enrique Bousquets fue sentenciado a 20 años de prisión, una sentencia que para los familiares de la víctima fue insuficiente ya que se había comprobado que se trataba de un pederasta que asesinó con alevosía y brutalidad a un menor de 9 años.
dahh.