David Sánchez Pérez fue dializado el jueves 27 de febrero en el Hospital Regional de Pemex en Villahermosa, Tabasco, y ahí empezó su viacrucis, pues terminó con la mitad del cuerpo paralizada, aseguró su esposa Dora Álvarez.
"Ahorita está un poco estable, le acaban de hacer su cambio de catéter, y gracias a Dios, dentro de lo que cabe está estable", dijo en entrevista con Azucena Uresti para Radio Fórmula.
Narró que el jueves de la semana pasada llevó a su esposo al hospital para que le realizaran la hemodiálisis que le correspondía, pero cuando regresaban de Villahermosa a Cárdenas empezó a sentirse mal.
"Después a las 7:30 de la noche que salimos, mi esposo empezó con temblor, fiebre y vómito y nos dirigimos al hospital de Pemex y ahí empezó nuestro viacrusis", recordó.
En el hospital un neurólogo revisó a su esposo, de 80 años, para saber qué es lo que le había provocado dicha reacción y el resultado fue que le dio un infarto cerebral, el cual causó que la parte izquierda del cuerpo se le paralizara.
"El neurólogo le hizo una tomografía y nos dijo que había sufrido un infarto cerebral, el viernes amaneció así, con parálisis en la parte izquierda.
"El infarto le dio en la parte derecha y le afectó en la izquierda y por eso está consciente y habla", dijo que le explicó el neurólogo.
Agregó que estos problemas de salud por los que está pasando su esposo son derivados del tratamiento de hemodiálisis que recibió al suministrarle una medicina contaminada.
"Mi esposo estaba bien, caminaba y se valía por sí mismo, pero a partir del jueves en la noche, mi esposo se sintió mal y ahora lo tengo en pañales", lamentó.
Adelantó que ella también se unirá a la demanda colectiva que se interpondrá por parte de familiares de otros pacientes que resultaron afectados, algunos de los cuales incluso murieron.
"Todos estamos unidos, desde los que perdieron a sus familiares y los que tenemos nuestros enfermos internados".
ledz