El alcalde de Torreón, Jorge Zermeño Infante afirmó que cerrará la administración con un balance positivo, aunque resaltó que la limitación presupuestaria impidió hacer más.
“Me voy con la frente en alto porque hicimos todo lo necesario con los recursos con los que contamos para darle prioridad a las necesidades de Torreón y por supuesto que siempre hay limitantes. Me hubiera gustado pavimentar toda la ciudad y que los servicios públicos estuvieran al 100 por ciento, pero se hizo lo que se puede”.
Afirmó que entregará cuentas claras y sin deuda para la próxima gestión municipal que arranca en enero.
“No nos robamos ni un peso y fuimos la administración que le dio más recursos y obras a Torreón”.
Cuestionado en torno a que en el cierre de su gestión hay funcionarios que dejaron de atender a ciudadanos, dijo discrepar.
“Yo respeto el punto de vista, pero puedo decir que tengo gente muy responsable en su trabajo y les pediría que no hagan juicios a priori cuando no se revisa todo el trabajo de alguien”.
Zermeño Infante declaró lo anterior tras acudir a la entrega de una aula en la Escuela Primaria Ramón López Velarde y ahí dijo confiar en que en breve se concrete un retorno a las labores académicas de manera más general.
“Yo hago votos porque lo más pronto posible nuestros hijos de todos los niveles educativos regresen a clases. Ahora de manera especial por la pandemia muchas escuelas fueron olvidadas y vandalizadas. Por eso hacemos un llamado a los padres de familia para que al menos se sumen a barrer y las reparaciones”.
CALE