El huracán Hanna ya dejó estragos sobre la costa del Golfo de México y fuertes precipitaciones en Tamaulipas y Nuevo León, sin embargo, el primer huracán de la temporada de ciclones del Atlántico tocó tierra dos veces en Texas como categoría 1 durante la tarde en un lapso de una hora.
La primera vez fue alrededor de las 17:00 horas, en Isla del Padre, a unos 24 kilómetros al norte de Port Mansfield, ubicado a unos 209 kilómetros al sur de Corpus Christi. La segunda ocasión ocurrió cerca del condado Kenedy, en el este. Hanna había tocado tierra con vientos máximos sostenidos de 145 kilómetros por hora.
Expertos advirtieron de posibles tornados en un estado que además enfrenta un incremento en los casos de coronavirus. El sábado en la noche, los vientos del meteoro habían bajado de potencia a 120 kilómetros por hora.
Asimismo, las autoridades de Nuevo León y Tamaulipas ya activaron los protocolos por el ciclón, que se debilitará a tormenta tropical en las próximas horas mientras mantenga su trayectoria hacia México.
"En las próximas horas vamos a sentir las primeras lluvias importantes que van a generar captación de agua en el estado de Nuevo León muy relevante. Estas lluvias son nada comparado a lo que viene, se tendrá una captación importante que seguramente en algunos puntos va a rondar entre los 250 y 300 milímetros y en otras zonas pudiera superar los 400 mililitros", advirtió Miguel Perales, titular de Protección Civil de Nuevo León.
En Texas, el alcalde de Corpus Christi, Joe McComb, dijo el sábado haber visto a algunos habitantes haciendo compras de último minuto, pero advirtió que si eso no se hubiera hecho, la gente habría tenido que quedarse en casa y capear la tormenta. La embajada de Estados Unidos ya emitió una alerta de viaje por el temporal.
“Nos hemos quedado en casa durante cinco meses debido al coronavirus... Así que quedarse en casa no suena agradable, pero en este momento es en verdad un asunto importante”, subrayó McComb, quien agregó que los habitantes deben recordar el uso de cubrebocas si desalojan sus casas.
El gobernador Greg Abbott dijo el sábado que se dará albergue en hoteles para que la gente pueda estar separada.
“No podemos permitir que este huracán conduzca a un evento más catastrófico y mortal, avivando una propagación adicional de covid-19 que pueda propiciar fallecimientos”, agregó.
dmr