El coordinador administrativo de la Secretaría de Desarrollo Social de Sinaloa, Carlos Baltazar Castro Olivas, fue quien adquirió el lote de colchones viejos disfrazados como nuevos que fueron entregados a damnificados por las lluvias, admitió el empresario Baltazar Castro Blanco, padre del funcionario estatal.
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Sin embargo, aclaró que la adquisición se hizo sin dolo porque el funcionario fue defraudado por la proveedora, identificada como Isabel Reyes Villanueva, con domicilio fiscal en Guadalajara, Jalisco.
En conferencia de prensa, Baltazar Castro señaló que fue él y no su hijo quien aclaró la situación debido a que el funcionario de la Sedesol estatal está en Guadalajara interponiendo los recursos legales correspondientes contra la empresa que le entregó los colchones.
Negó que el coordinador administrativo haya huido cuando supo que se le estaba acusando y adelantó que cuando el funcionario vuelva a la entidad, "se dirigirá a los medios".
Indicó que el mismo gobierno estatal fue quien ordenó a Castro Olivas buscar más proveedores para adquirir colchones porque que en el estado y zonas aledañas a la región ya no había por la alta demanda que se generó ante la contingencia.
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Tras recibir la indicación, el funcionario compró un lote de mil 380 colchones a Isabel Reyes sin saber que estaban en mal estado porque todo lo recibido estaba completamente sellado.
Previamente, los proveedores a los que se compraron más de 14 mil colchones para repartir fueron Grupo Coppel, Mueblerías Valdez Baluarte, Más Colchones, Luis Salcido, Comercializadora El Mariachi, Colchones Armon Honey, César Augusto Leal y Grupo Lara Flores.
El empresario señaló que su hijo no tiene por qué ampararse ni protegerse debido a que no ha cometido algún delito y aseguró que se demostrará a los damnificados que la entrega "se hizo de buena fe".
RLO