Mediante una inversión de aproximadamente 12 millones de pesos, el presidente municipal de Altamira Armando Martínez Manríquez inauguró el cenizario municipal que lleva por nombre “Ana María Cruz de Tavera” se trata de un espacio en donde se podrá honrar la memoria de los seres que se han adelantado en el camino.
La obra, que se encuentra en la zona centro, se edificó en tres etapas, la primera consistió en la construcción de más de 1 mil 840 urnas, cuenta con una cúpula que cubre más de 140 metros cuadrados con piso cerámico. Además se construyeron oficinas administrativas y los sanitarios.
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La segunda etapa consistió en la instalación de las letras metálicas que identifican el cenizario, la adquisición y colocación de ocho equipos de aire acondicionado, además la construcción de casi 100 metros lineales de guarniciones.
Contempló también la colocación de concreto estampado, la instalación de luminarias y reflectores tipo LED, lo anterior conllevó también a la construcción de una subestación eléctrica para garantizar el suministro de energía de las instalaciones.
Durante el acto protocolario, el alcalde destacó que a través de esta obra se ofrecerá un espacio digno y accesible para el resguardo de los restos de los seres queridos de los altamirenses.
BRR