Prácticamente en la historia de este planeta, durante miles de millones de años existen unos seres que lo han habitado y siempre han sido la parte medular para que exista la vida, en donde además predominan en número y por mucho a comparación de cualquier otro ser vivo en la faz de la tierra.
Existen en todos lados, en la calle, en tu casa, en tu cocina, en tu cuarto, en tu jardín, en tu trabajo, en cualquier parte, en donde a veces pasan desapercibidos, pero en otras son parte vital de nuestro entorno.
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Nos referimos al siempre sorprendente mundo de los insectos, seres muy coloridos, raros, que hasta parecen extraídos de otro planeta, algunos provocan miedo, otros hasta ternura, pero todos son vitales para la cadena alimenticia en la faz de la tierra.
En nuestra Comarca Lagunera, como en cualquier otra parte, hay lugares en donde nos hemos encontrado sorpresivamente esos seres raros, que también apasiona fotografiar y conocer cuál es su objetivo en nuestro planeta.
Conoce el ritual de las catarinas
Hace tiempo, en uno de los jardines de una universidad de Torreón, en esa ocasión andábamos dando cobertura a un evento y al final me encaminé a una de las jardineras, en donde al irme aproximando a unos troncos ya derribados de algunos pinabetes, me llamó la atención un color rojo a la distancia.
Ya más cerca fue sorprendente ver una gran cantidad de catarinas, también conocidas como vaquitas o mariquitas, obvio que las fotos no podían faltar para investigar después por qué tantas se encontraban reunidas en un solo lugar.
Se dice que una vez al año las catarinas realizan un ritual, esta especie se alimenta de pulgones, que son una plaga que desaparece con el invierno, es cuando las vaquitas emprenden un vuelo al bosque más cercano o lugar donde antes habían procreado generación tras generación.
Las catarinas viven menos de un año aproximadamente, estas se aparean varias veces con diferentes parejas, una hembra puede poner hasta 500 huevos en su vida. Después de reproducirse es cuando se juntan y entran en diapausa, que es una especie de hibernación.
Pero... ¿qué comen las catarinas?
En esta etapa de diapausa su metabolismo se reduce, no salen de este estado hasta la primavera, que es cuando vuelven a irse cada una por su lado, hasta repetir este ritual. Son chiquitas, amigables, de colores atractivos y no nos pican, pero realmente, cada vez es menos frecuente encontrar una catarina en la ciudad o, ¿cuándo fue la última vez que viste una y dónde?
Las catarinas son un tipo de escarabajo popular por sus colores, tal vez alguna vez has escuchado que la cantidad de manchas en su caparazón indica su edad, pues esto es falso; en realidad las manchas dependen de la especie de mariquita. ¡Hay más de 6 mil especies! Esto significa que puedes encontrar más de 6 mil tipos de patrones en sus conchitas, con rayas, puntos, dibujos y más.
En cuanto crecen, las catarinas comen menos porque se vuelven más selectivas, escogen presas de mayor tamaño, aunque también las hay vegetarianas, la mayoría son carnívoras y se alimentan de pulgones, cochinillas, ácaros y larvas de moscas.
Algunos de estos animalitos, especialmente los pulgones, son considerados como plaga para algunos jardines o cultivos, pues se alimentan de la savia de las plantas, destruyéndolas en el proceso. Por eso, las catarinas son valoradas como controladores biológicos, pues cuidan a las plantitas de ser devoradas por demasiados pulgones.
El ácaro de terciopelo inicia su vida como parásito
Fue en el llano, allá por el ejido La Concha, en una de esas “pajareadas” no planeadas en un terreno con una superficie muy plana, donde llamó mi atención un pequeño insecto de llamativo color rojo, a primera vista pensé que era una de esas desagradables garrapatas, pero no, se trataba de un insecto mucho más interesante y agradable a la vista, un ácaro de terciopelo (Trombídidos).
Los trombídidos (Trombidiidae) son una familia de ácaros conocidos como ácaros de terciopelo, son unas 250 especies en todo el mundo, numerosas en zonas tropicales, se denominan así debido a su abundante pubescencia aterciopelada. Cuando son adultos miden de 4 a 12 mm y comen huevos de insectos, pero comienzan como parásitos, atacan a insectos, arañas y opiliones.
Con frecuencia los adultos emergen del suelo después de la lluvia para aparearse. Tras manipularlo un rato, es decir levantarlo con una rama para poder admirar, lo dejamos seguir su camino.
El Cysteodemus Wislizeni, un ser de otro planeta
La verdad y por mucho buscar e investigar qué es este insecto, poco se sabe, Cysteodemus Wislizeni, en otros lados le conocen como Black Bladder-bodied Meloid, mejor nombrado como “Meloide con cuerpo de vejiga negra”.
Este ser tan extraño lo vine a encontrar allá cerca del poblado Dinamita, Durango, entre los matorrales de la planta conocida como Gobernadora, donde era espectacular su colorido, un verde metálico, al moverse con los tonos del brillo solar se veía púrpura, otras esmeralda, pero se trata de un sorprendente insecto con tremenda “panza” y diminuta cabeza, un ser de otro planeta.
La chinche gigante del mezquite, como un escudo labrado a mano
En los mezquites de nuestra Comarca Lagunera es muy común encontrar muchas especies de insectos, pero en particular uno de los más bellos es sin lugar a dudas la chinche gigante del mezquite. En su pura apariencia pareciera uno de esos escudos labrados por alguna tribu africana, sus contornos, colores y líneas la hacen muy llamativa y sobre todo su tamaño.
Se dice que estas chinches suelen ser alimento muy nutritivo en diferentes partes de México, aunque por su aspecto no parecen antojables. Son del tamaño de una cucaracha grande y se alimentan de las vainas del mezquite, en donde suelen depositar sus huevos en cadena hasta de 12.
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