Por lo menos tres manifestaciones se han registrado en los municipios de Ciudad Guzmán, Pihuamo, Teocaltiche y Ocotlán para exigir la salida de militares y Guardia Nacional al asegurar que son supuestamente extorsionados y acosados por las fuerzas del orden federal.
El viernes pasado, alrededor de mil 100 personas salieron a la vía pública a protestar para exigir justicia por la muerte de un joven, quien, a decir de ellos, viajaba en una motocicleta y fue atropellado por una unidad de la Guardia Nacional, cuando circulaba por la colonia Lázaro Cárdenas en la región Ciénega.
El accidente se registró el pasado 10 de enero en horas de la madrugada, cuando los efectivos estaban en su recorrido de vigilancia y delante de ellos circulaba el motociclista.
Pero, de acuerdo con un video de cámaras de seguridad de particulares, en el momento del percance se aprecia cómo el joven pasa un tope a toda velocidad y luego se estrella contra un auto estacionado; cuatro segundos después aparece una unidad de la Guardia Nacional, en donde los soldados se bajan a auxiliar a la persona accidentada.
A pesar de esa evidencia, los ciudadanos de esa región no quedaron convencidos y acordaron sostener una mesa de diálogo con mandos de la XV Zona Militar, la Guardia Nacional y la Fiscalía del Estado, para determinar qué ocurrió en realidad.
En otros hechos, el 3 de diciembre de 2023, elementos de la Secretaría de Marina realizaron diversos cateos en la comunidad “Las Naranjas”, situada en la zona serrana en los límites de Jalisco con Michoacán y Colima.
Ahí aseguraron todo un arsenal de guerra, después de la detención del líder regional del Cártel Jalisco Nueva Generación en Tapalpa conocido como El CR.
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Esa comunidad es habitada por solo 221 personas, quienes denunciaron presuntos robos por parte de los uniformados y presionaron hasta que la Octava Zona Naval retiró a los efectivos.
Sobre el arsenal encontrado en esa comunidad, se les cuestionó y dijeron desconocer por qué su población fue utilizada como almacén de armas y droga.
La misma situación se registró en noviembre del año pasado en el municipio de Teocaltiche, que está bajo el control de una célula del Cártel de Sinaloa, donde los pobladores señalaron abusos de la Policía Estatal y exigieron que no ingresaran a realizar recorridos de vigilancia.
Pero esto no es nuevo: también en junio del 2018, durante varios días, pobladores se inconformaron para exigir la salida de las fuerzas militares, señalando abusos que no denunciaron ante un agente del Ministerio Público, y terminaron apedreando las patrullas e igualmente lanzando piedras a los elementos y colocaron letreros en los cristales del Cártel Jalisco Nueva Generación.
En el último caso de Ocotlán, registrado el viernes 12 de enero, estuvieron circulando audios de Whatsapp, donde se escuchan voces donde se invitaba a pobladores a manifestarse porque los guachos “no los dejan trabajar” y tenían que correrlos “a como diera lugar”.
De acuerdo con fuentes extraoficiales consultadas por MILENIO, en todos los escenarios, las inconformidades estarían siendo alentadas por los grupos criminales que operan en cada una de esas regiones.
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