Darle vida al personaje más importante de la historia, Jesucristo, en el Viacrucis en el Cerro de las Noas, le ha dejado al actor lagunero José Luis Hernández Rivera además de una gran enseñanza, un cambio en su vida personal, que le ha permitido volverse más comprensivo, amigable y sensible con el prójimo, así lo dio a conocer en entrevista para MILENIO.
"Me sensibiliza mucho todo lo que hizo, los sacrificios y evidentemente trastocó un poco y me vuelve una persona más sensible, una persona que trata de ser mucho más comprensiva y amigable con los demás, este es mi tercer año consecutivo que lo represento y me hace muy feliz", detalló el actor de teatro.
José Luis Hernández Rivera, compartió que fue la señora Tomy Pargas, encargada de llevar a cabo esta tradición año con año, la que lo invitó a participar con el personaje de Jesús en el Viacrucis viviente del Cerro de las Noas.
"Tomy y yo nos conocimos en el 2007, ella trabajaba en el teatro Alfonso Garibay y en ese año el teatro cumplió 50 años, yo hice una temporada de teatro con "Las mujeres sabias", ahí nos conocimos, nos hicimos buenos amigos, le gustó mi trabajo y me invitó para que hiciera el personaje de Jesús en el Viacrucis del Cerro de las Noas, una tradición primero en la colonia Jacobo Meyer desde hace 51 años, y en el Cerro de las Noas, hace 41 años, fallece su papá don Luis Pargas y Tomy se queda al cargo, y siempre me invitaba, pero por diferentes circunstancias no podía interpretar a nuestro Señor, vivía yo fuera, primero en Saltillo, luego en Ciudad de México, y en el 2022 yo ya vivía de nuevo en Torreón y le dije , ahora estoy libre y puedo hacerlo, y así se dio la primera vez que lo hice".
Señaló Hernández Rivera, que desde un principio hizo clic con los demás actores que participan, "en la Jacobo Meyer es el punto de reunión con los demás actores del elenco, fue una cosa maravillosa, porque fue conectar con estas personas del barrio, carpinteros, obreros, albañiles, de todo se conforma el elenco y ver cómo tienen una gran devoción y una pasión increíble por representar año con año el Viacrucis, ha sido increíble contagiarte de algo tan lindo y un entorno del barrio tan bello, tan maravilloso que me impactó mucho".
Privilegio y honor
Para el también productor audiovisual, darle vida a Jesús, asegura que es un honor y un gran privilegio, "en una tradición tan importante como lo es el Cerro de las Noas que sabemos que es multitudinaria, que la gente asiste con fe, y para mí significa aportar un granito de arena para que la tradición siga y para que la gente que vaya y vea el viacrucis, dimensione un poco el sacrificio que hizo Jesús".
Confesó el actor lagunero que le da vida a Jesús con mucha devoción, ya que cuando era niño llegó a anhelar algún día poder representarlo y finalmente se le cumplió, "desde niño siempre veía las películas en Semana Santa y el personaje de Jesús me parecía increíble, maravilloso, admirable, y sinceramente o inconscientemente algo dentro de mí me dijo que yo algún día iba a representarlo y nunca me imaginé que en estas circunstancias, por lo que me siento muy afortunado por hacerlo".
Sacrificio físico
En estos tres años que ha experimentado cargar la pesada cruz, no ha dejado de ser un gran sacrificio físico, mismo que lo ofrece por su familia.
"Se lo dedico a mi familia, a mi mamá, mi papá, hermanos que me acompañan año con año a esta tradición, tratando de que signifique algo para la gente que va a verlo, tratamos de hacerlo con todo el respeto del mundo, de la forma más veraz posible, para que la gente realmente dimensione un poquito".
Preparación física y espiritual
Indiscutiblemente, personificar al hijo de María le ha dejado a José Luis numerosas enseñanzas, "ha logrado que yo lea mucho más sobre el personaje, que medite como el personaje, es una preparación física y espiritual previa al Viacrucis, y evidentemente estudiar este personaje histórico, me sensibiliza mucho de todo lo que hizo, de los sacrificios, me ha cambiado mucho la experiencia, es algo que espero yo año con año".
"Los dos años previos a este, cada vez han sido experiencias muy diferentes, gente que me ha acompañado en el Viacrucis y que ahora ya no está, pero luego vienen nuevas personas que me acompañan y cada año se suman más participantes como apóstoles, personajes, las personas que me hacen vestuario, maquillaje, los feligreses que me acompañan en la subida al cerro, todo es muy lindo y significativo, es una experiencia que se queda conmigo para siempre".
Se prepara desde enero
Asegura el joven que desde el mes de enero se mentaliza y se concentra perfecto en el personaje, por lo que se va dejando crecer la barba y el bigote, "voy haciendo meditación, tratando de concentrarme en mi parte espiritual, y también la preparación física para lograr soportar el calor de las 11:00 de la mañana o 12:00 del mediodía en Torreón en Viernes Santo, el peso de la cruz, los golpes de los soldados, latigazos, bofetadas, esto es en el Cerro de las Noas en la mañana, y por la tarde en la colonia Jacobo Meyer, que es el núcleo de los actores de esta representación".
"Hacemos otra vez la representación a las 6:00 de la tarde, pero es más extenso todo porque hacemos lo de la última cena, lavatorio de pies, aprehensión, el encuentro con María, cosa que no hacemos en el cerro por cuestiones de logística, allá es el juicio de Pilatos y la crucifixión, entonces son dos representaciones donde hay que cargar cruz, latigazos, crucifixión y físicamente también se requiere de una preparación muy importante y ha significado para mí que esa sea mi Semana Santa".
Que los niños vivan la tradición
El lagunero espera interpretar al "Rey de Israel" por muchos años más, por lo que para finalizar, brindó el siguiente mensaje a sus paisanos, "me gustaría mucho que las personas nos acompañen en el Viacrucis, y que cuando termine la representación algo en ellos haya cambiado, que algo en ellos sea diferente para bien después de ver la representación que hacemos con mucha devoción, con mucho cariño y pasión, vayan y dimensionen".
"Lleven a sus niños, es muy importante que ellos se acerquen a este tipo de tradiciones que los sensibiliza y los marca de manera positiva, acompáñenos y sean parte de esta tradición, y que ojalá este año no sólo fueran espectadores, que la gente que vaya al cerro comparta la experiencia escénica y si ven la injusticia que le hacen a Jesús los farieseos y romanos, griten y lo defiendan, que en el trayecto de la cruz vayan apoyándolo con sus gritos, cantos y oraciones, queremos que este no sea un Viacrucis pasivo, sino didáctico y que la gente se sienta parte de ello".
EGO