Uno de los símbolos de La Laguna, además del Cristo de las Noas, la Puerta Amarilla o el Manto de la Virgen, es sin duda el Río Nazas, que divide a los estado de Durango y Coahuila.
El río que nace de los ríos Santiago, Tepehuanes y Ramos, recorre alrededor de 360 kilómetros, es parte de la cultura de la Comarca Lagunera y es uno de los lugares emblemáticos de la región.
A lo largo de su historia el agua ha corrido por su cauce y en MILENIO te decimos cuáles han sido las más importantes.
1958, llega la alerta
En las páginas de La Opinión el 15 de septiembre de 1958 se anunciaba la ininente llegada del agua por el Río Nazas, pues el mismo llevaba una de sus más grandes crecientes hasta ese momento.
Sin embargo, el lugar más afectado por el agua fue Bermejillo, Durango, pues con alrededor de 25 millones de metros cúbicos inundó la zona, afectando también los cultivos de algodón y maíz, además de dañar vías ferroviarias y dejar La Laguna incomunicada de otras zonas.
1968, habitantes salen de la Comarca
Para septiembre, pero 30 años después de la primera avenida del río, se tenía un protocolo de actuación y en Torreón se evacuó a los habitantes de 8 clonias, Moderna, Esparza, Nazario Ortiz Garza, Felipe Ángeles, Eugenio Aguirre, Francisco Villa, Cuauhtémoc y Ampliación Los Ángeles.
De igual manera muchos habitantes tomaron sus precauciones y dejaron la Comarca ante la alarma que significaba la segunda avenida del Nazas, viajando en auto y saturando los vuelos hacia la capital del País, Chihuahua, Durango, Mazatlán y Juárez.
En ese momento, por las circunstancias, se tuvo que suspender la tradicional Feria del Algodón en su edición 22.
1991, regresa el agua
Luego de 23 años, en agosto de 1991 el agua volvió a correr, sin dejar los estragos de años anteriores, pero provocando caos en la Comarca, además de alrededor de 350 personas damnificadas. En esta ocasión también se comenzó a evacuar a los habitantes de los poblados que corrian el riesgo a inundarse.
Además, se cerró el paso por los 5 vados de la zona para evitar que alguien quedara atrapado en la corriente, y pese a que esto representaba una emergencia y activaba protocolos de seguridad, muchos laguneros se dieron cita en las inmdiaciones del Nazas, pues muchos no fueron testigos de lo acontecido en 1968.
Lo que marcó la diferencia entre esta tercera avenida del agua y la segunda, en la que distintos sectores resultaron afectados, consta en que la presa Lázaro Cárdenas presentaba un aumento de 5 metros en la cortina, lo que permitió aumentar su capacidad de captación de agua.
2008, se volvía a abrir la presa
Ya en 2008 se volvían a abrir las compuertas de la presa Francisco Zarco para que el agua volviera a correr por el Río Nazas, activando el protocolo de evacuación y aseguramiento del perímetro del río.
En esta ocasión ya con un protocolo y con la experiencia de las anteriores veces que el agua corría por el Nazas, los estragos fueron menores y no se vivió el caos que en años anteriores.
2010, avenida menos riesgosa
Solo un par de años después de haber regresado el agua, el Nazas revivía, ahora visto como una atracción, los habitantes de La Laguna esperaban ansiosos el paso del agua. Por esto, se pedía a la población tomar precauciones para evitar riesgos, pues en grandes grupos planeaban darse cita en las inmediaciones.
2016, Nazas dejará sin agua a 30 mil usuarios
Ahora en la era de las redes sociales, los laguneros le daban la bienvenida al agua con celulares listos para compartir imágenes y transmitir el momento en que los 35 metros cúbicos por segundo corrían por el lecho seco del Nazas.
Además, algunos de los estragos fueron 30 mil usuarios sin agua y la cancelación de la línea de drenaje mientras pasara el agua del río Nazas. También se protegió el puente Solidaridad con un dique.
EGO