Agua Saludable para La Laguna pone en grave riesgo al Cañón de Fernández; Conagua responde

Indican que más del 90 por ciento de agua potabilizada se perderá en fugas o se irá al drenaje ante la fallas que ostentan las líneas de conducción.

Los ambientalistas aseguran que la Conagua no informa correctamente el proyecto. (Manuel Guadarrama)
Editorial Milenio
La Laguna /

"El derecho humano al agua de quienes viven en la Comarca Lagunera ha sido vulnerado por la sobreexplotación de los mantos acuíferos producto de la inacción de la Comisión Nacional del Agua", así lo afirman los activistas y defensores medioambientales que constituyen la asociación Prodenazas. 

En comunicado de prensa apuntaron que los ecosistemas de la reserva ecológica Cañón de Fernández requieren flujos de agua que evoquen el funcionamiento natural del río, sin embargo, se mantiene la amenaza de perturbar sus procesos.

“El Cañón de Fernández es aún un ecosistema rico y complejo, no es el jardín de una casa. El Parque Estatal Cañón de Fernández es un área natural protegida, un humedal de importancia internacional (Sitio Ramsar) y es considerada una unidad de protección por el municipio de Lerdo y el estado de Durango".

“Esas cuatro categorías prohíben la construcción de una obra dentro de todo el polígono del parque. Es falso que Conagua pueda asegurar que no se generarán impactos negativos. Lo mismo aseguraban falsamente las autoridades federales cuando se construyó la termoeléctrica Guadalupe Victoria en Villa Juárez, Durango”. 

Consecuencia para ecosistema

Asimismo afirmaron que el proyecto Agua Saludable para La Laguna es un grave riesgo para el Cañón de Fernández ante una campaña de desinformación realizada por la Conagua y es por ello que como opositores al proyecto puntualizan que el funcionamiento futuro del proyecto depende de que haya cesiones de derechos de agua por parte de los usuarios y, a la fecha, no cuentan ni con el 10 por ciento de los volúmenes que el proyecto demanda.

Asimismo refieren que el proyecto planeado requiere desecar el río haciendo un canal de alivio, lo que implica un gran movimiento de maquinaria pesada, material y personal dentro del parque.

“Las obras contempladas afectarán para siempre 35 mil metros cuadrados del polígono del parque, lo que equivale a 134 canchas de tenis, 35 albercas olímpicas o 5 canchas de futbol profesional. El Río Nazas, dentro del Parque Estatal Cañón de Fernández conduce agua todo el año. Este megaproyecto representa, en su inversión inicial, más de 5 veces el presupuesto anual de Torreón”, precisaron.

De igual manera indican que más del 90 por ciento del agua potabilizada se perderá en fugas o se irá al drenaje ante la fallas que ostentan los servicios operadores en sus líneas de conducción.

“Solo requerimos agua saludable para beber y cocinar. El proyecto Agua Saludable no puede hacerse dentro del polígono del Parque Estatal Cañón de Fernández el cual fue decretada área natural protegida por todos los bienes y servicios que da a la sociedad lagunera. Reiteramos nuestra exigencia de dotar de agua saludable a la población lagunera pero no a costa de destruir el patrimonio natural nuestro y de las generaciones futuras”, concluyen.  

Conagua asegura que habrá más agua

Entre las precisiones al respecto, la Conagua indica que “el proyecto ASLL generará importantes beneficios ambientales para dicha área, incluido el incremento en el caudal de agua. 

Es falso que el desarrollo del proyecto vaya a provocar impactos negativos irreversibles”. 

Además, se pretende que el cañón reciba más beneficios ambientales, tal como se explica en el texto, donde señala que el caudal del Río Nazas correrá durante los 12 meses del año, y no sólo cuatro como está establecido actualmente, así, por el cañón transitarían aproximadamente 6 mil 340 litros de agua por segundo. 

El comunicado de prensa aclara que el estudio de impacto ambiental se basa en el cumplimiento de todos los aspectos que la normatividad establece, con un plan a detalle de las medidas de protección de la zona. 

“El proyecto ASLL tiene como objetivo aprovechar los escurrimientos superficiales del río Nazas para abastecer de agua potable a aproximadamente 1 millón 650 mil personas de los municipios duranguenses de Gómez Palacio, Lerdo, Tlahualilo y Mapimí, así como para los coahuilenses de Torreón, Matamoros, Francisco I. Madero, San Pedro y Viesca”. 

Asimismo, se asegura que la derivadora se construirá fuera del núcleo del Cañón de Fernández, en una zona que ya está alterada por actividades humanas, especialmente la agricultura. Se buscará también disminuir la extracción de agua en pozos que actualmente abastecen a la población de la región y recuperar el nivel del acuífero principal.

RCM

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