Cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que cada minuto con catorce segundos en el mundo una persona piensa en quitarse la vida, datos alarmantes que aunados a los casos suscitados en La Laguna, autoridades a nivel regional han emprendido acciones para atender la problemática social.
Judith Varela Ríos vicepresidenta de Profesionales de la Red Mundial de Suicidologos, contribuye en un programa de actividades implementado por la Subsecretaría de Educación en el Estado de Durango en Laguna, y consistente en emitir pláticas a los alumnos principalmente de secundaria para brindarles una orientación.
A través de la conferencia, 'Dale Like a tu vida' la suicidóloga busca tener el acercamiento con los jóvenes y prevenir el suicidio, como lo informó previo a presentarse ante los alumnos de la Escuela Secundaria 'Josefa Ortíz de Domínguez' de Gómez Palacio, Durango.
“Es importante que se puedan establecer estos canales de comunicación, y sobre todo un lenguaje apropiado para nuestros adolescentes laguneros que tienen mucha necesidad de saber que hay muchas razones por las cuales vivir”.
Varela Ríos desde hace seis años tiene trabajando con el proyecto, con el cual han tenido importantes resultados.
Otra de las estadísticas preocupantes que maneja la OMS es que si bien hace varios años, las edades de los más jóvenes que cometían el suicidio era a los 18 años, actualmente, la edad en que se está presentando este problema son en menores de 11 años, y cada vez con mayor frecuencia.
Señales de alerta
La especialista en el tema, recomendó a los padres de familia o a las personas cercanas a los jóvenes y a los niños, a estar alerta ante cualquier cambio de comportamiento, es decir, si dejan de socializar como lo solían hacer, o si invierten mucho tiempo en las redes sociales, o en los juegos es una señal para poner atención.
También invitó a los padres de familia a establecer reglas concisas desde temprana edad y enseñarlos a manejar las emociones para direccionarlas de una manera positiva.
En su experiencia en el trabajo de “postvención” que lleva a cabo con madres, en la mayoría de los casos aseguran que no hubo señales que les indicarán las intenciones de sus hijos o inclusive un sentimiento depresivo.
“Afortunadamente el suicidio es la única muerte que se puede prevenir, esa es la gran noticia, y afortunadamente es el establecimiento de una comunicación clara con tú hijo con tú hija, con afecto, con amor”, finalizó.
aarp