La laguna de Tecocomulco, el último humedal natural del Valle de México, se encuentra en grave peligro debido a la sequía que azota la región. Ubicada entre los municipios de Tepeapulco, Apan y Cuautepec de Hinojosa, este cuerpo de agua es considerado un patrimonio ecológico de la humanidad y un sustento vital para muchas familias en Hidalgo.
Inscrito en la lista mundial de la Convención de Ramsar, que se dedica a la preservación de estos sitios, la laguna de Tecocomulco enfrenta una disminución preocupante en su nivel debido a la escasez de lluvias y la temporada de estiaje. En algunas áreas, se ha registrado una disminución de más de metro y medio, lo que ha provocado graves consecuencias para su ecosistema.
Los habitantes que viven en los alrededores de la laguna han observado con preocupación la erosión en varias partes del humedal y la desaparición de muchas especies de aves que solían anidar en este importante refugio natural.
Además de las repercusiones ecológicas, la sequía también está afectando la actividad turística en la zona. El bajo nivel del agua ha hecho que las lanchas no puedan realizar sus recorridos con normalidad, lo que dificulta la experiencia turística y pone en riesgo la economía local.
¿Qué es un humedal?
Los humedales, como la laguna de Tecocomulco, son ecosistemas fundamentales que actúan como zonas de transición entre los entornos terrestres y acuáticos. Durante las inundaciones, absorben el exceso de agua de lluvia, evitando así daños en las viviendas y ayudando a regular el flujo hídrico en la región.
Se estima que una media hectárea de humedal puede almacenar más de 3,7 millones de litros de agua de inundación, subrayando la importancia crítica de estos ecosistemas para el equilibrio ambiental y la seguridad de las comunidades locales.