Desde hace 17 años ha estado preso en una celda en el penal del Altiplano, en el Estado de México. Israel Vallarta Cisneros, señalado por las autoridades como líder de la banda de secuestradores Los Zodiaco, confía en que saldrá.
En entrevista telefónica con MILENIO, flexiona sobre su pasado y reconoce que si pudiera cambiar algo es “quizás no haber tenido más valentía así como lo hizo Florence Cassez”, su ex pareja de nacionalidad francesa, quien fue absuelta de secuestro y denunció en un programa de televisión haber sido detenida antes del operativo que fue televisado; el hombre reconoce que calló un poco y cedió a la presión de la policía para no decir cómo habían pasado las cosas el día en que lo acusaron de ser un delincuente.
Según acusó su familia, fue torturado y obligado a aceptar que era un secuestrador; todo bajo maltratos de la entonces Agencia Federal de Investigaciones (AFI).
De acuerdo con la serie documental El caso Cassez-Vallarta: una novela criminal, aquel 9 de diciembre Florence Cassez "odió profundamente" a Vallarta.
“Al principio, no podíamos hablar entre nosotros. No era posible, sólo intercambiamos miradas que fueron capturadas en una foto; una foto muy fea donde lo estoy mirando (…) Yo lo odié profundamente. No entendía qué había pasado ni por qué estaba allí y sólo sentí odio.
"Me enojé con Israel porque lo único que sabía era que si yo estaba donde estaba no era por mi culpa; no había hecho nada, así que tenía que ser él", dijo Cassez en la serie.
Israel Vallarta cuenta que en esta ruta para obtener la medida cautelar de prisión domiciliaria y no seguir bajo prisión preventiva oficiosa, todo ha sido caótico.
El cierre de su proceso, refiere, le ha sido negado por “situaciones muy extrañas que suceden”; no obstante, él sigue peleando para demostrar elementos a su favor pese a que las autoridades federales señalan que él mismo ha entorpecido el caso con pruebas.
La detención de Israel Vallarta Cisneros fue transmitida en vivo el 9 de diciembre de 2005 en el rancho Las Chinitas, ubicado en la carretera México-Cuernavaca, donde estaba junto con su Florence Cassez por presuntamente secuestrar a tres personas y liderar la banda delictiva Los Zodiaco; no obstante, ambos habían sido detenidos un día antes y llevados a dicho terreno.
En el supuesto operativo participaron elementos de la entonces Agencia Federal de Investigaciones (AFI), liderada por Genaro García Luna, hoy preso en Estados Unidos por presuntos nexos con el crimen organizado. Incluso se supo que en la detención participó Luis Cárdenas Palomino, quien se encuentra detenido en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, por el delito de tortura.
Tras las sospechas de que su detención era un montaje, Genaro García Luna fue invitado al programa de noticias de la periodista Denise Maerker. En aquella ocasión, Cassez, quien ya estaba arraigada, pudo hablar en televisión abierta y aseguró que fue detenida el 8 de diciembre en la carretera.
“Cuando estábamos en la casa de arraigo, el día que Florence hizo su llamada, ella estaba en el piso tres, yo estaba en el piso uno. Yo estaba también esperando a tener comunicación, estaba en el teléfono, cuando hace Florence su llamada y la pasan al aire, llegan conmigo inmediatamente, me amagan los de la AFI, me quitan mi tarjeta, me suben esposado a la azotea y hasta las 10 de la noche me tuvieron arriba. Me prohibieron bajar todo el día, no me dieron alimentos, me pusieron dos o tres golpes.
“Si me hubieran permitido hacer mi llamada otra cosa hubiera sido. Quizá lo que yo lamento es que en el momento de salir en vivo (en el operativo en el rancho Las Chinitas) de lo que supuestamente estaba pasando, si yo hubiera seguido siendo firme en seguir negando los hechos y no aceptarlos de manera parcial como lo vieron en la televisión, quizás otra cosa hubiera sido, pero quizás hubiese sido peor porque la amenaza hacia mi familia siempre estuvo latente”, confiesa Israel.
Para él, Alejandro Gertz Manero, titular de la Fiscalía General de la República (FGR), “tiene a su mano y alcance la llave” para retirar los cargos en su contra.
“Ninguna razón jurídica justifica este tiempo sin que me haya dado sentencia, este proceso por tantos años es ilegal”, dice.
—Si quedaras en libertad total, ¿Qué pasará contigo si sales, te sentirías seguro estando afuera?
“Seguridad siempre he sentido, en todos estos años he sufrido todo tipo de ataques, no solamente mediáticos, sino también físicos, psicológicos y de todo tipo. Es una pregunta interesante, pero yo creo que de manera clara la podría contestar cuando, Dios quiera, esté en total y absoluta libertad. En cuanto a la situación de esta medida cautelar que pudiera presentarse, que no es la que yo busco o por la que yo me quiero ir, hay que conseguir la libertad”.
El 5 de julio de 2021, el ex director de Seguridad Regional de la Policía Federal, Luis Cárdenas Palomino, fue capturado en un fraccionamiento del municipio mexiquense de Naucalpan por su presunta responsabilidad en el delito de tortura y la FGR lo internó en el penal de máxima seguridad del Altiplano; misma cárcel en la que se encuentra Israel.
Aunque no comparten celda o el mismo pasillo, comenta que si lo llegara a ver, lo ignoraría y no tiene intención de cruzar palabras con él; “aquí no me interesa en lo más mínimo, de hecho le pido a Dios que lo cuide porque no tiene caso que le pase algo aquí y que no pague lo que debe”, pues Israel, manifiesta, “no es quién para hacer justicia”.
“No tengo contacto con él porque tiene una guardia especial, lo sacan seis, siete u ocho custodios, no permite que nadie se cruce”, reveló previo a que la llamada a la que tiene derecho un día por semana le fuera cortada y durara solo ocho de los minutos correspondientes.
En junio pasado, un Tribunal Federal confirmó el auto de formal prisión dictado contra Luis Cárdenas Palomino, por lo que continuará interno en el penal de máxima seguridad del Altiplano, enfrentando su proceso por el presunto delito de tortura en agravio de cuatro presuntos secuestradores.
En la sentencia se menciona que hay elementos que hacen presumir que el 27 de abril de 2012, el ex director de Seguridad Regional de la Policía Federal “autorizó” a servidores públicos a su mando “infligir dolores y sufrimientos físicos y psicológicos a las víctimas”Mario Vallarta Cisneros, recluido en la misma cárcel que Israel; y su sobrino Sergio Cortez Vallarta, internado en el penal de Michoacán, así como a los hermanos Eduardo y Ricardo Estrada Granados.
Mario Vallarta Cisneros aseguró en entrevista con este medio, que su hermano Israel, con quien estaba a un lado cuando platicaba con MILENIO, “le cortaron la llamada” y de inmediato fue reportado por supuestamente “haberse pasado la bocina”.
“Nada más para que veas la represión que tenemos todavía aquí adentro, por parte del penal, hacia nosotros (…) aquí están alegando con mi hermano”, relata, mientras responde al personal de seguridad del penal que él puede hacer lo quiera con su llamada; “Vean lo que está pasando, quieren sancionarnos ahorita que porque nos pasamos el teléfono”, denuncia.
El hermano de Israel acusó una desigualdad y discriminación hacia ellos, porque a “Luis Cárdenas Palomino, entraron medios de comunicación, para hacerle una entrevista, él se negó, no quiso ir”.
“Nosotros, como te comenta mi hermano, tenemos años solicitando lo que nos han negado: nuestro derecho que tenemos para expresarnos libremente”, refiere y con certeza dice no temer por su vida ni la de su hermano, pues confía en que saldrán de este penal de máxima seguridad.
“De que van a seguir amedrentando, lo van a seguir, pero ya no va a ser tan fácil, vamos a tratar mucho de cuidarnos a nosotros, a nuestra familia más que a nada, y vamos a seguir con la frente en alto. Ya están mis hermanos afuera, no tarda Israel, no tarda mi sobrino y no tardo yo (…) aquí tienes mucho tiempo para pensar y la gente que nos causó tanto daño a toda mi familia, a mis padres, pues los va a alcanzar alguna justicia, yo creo en la justicia, y si no es la del hombre podría ser una justicia divina”.
“Toda acción tiene una reacción. Un ejemplo muy claro, ahí está Luis Cárdenas Palomino. Todo lo que hizo y se sentía intocable, se sentía súper policía apoyado, se terminó porque él es un torturador”, expresa.
— ¿Perdonarías a Luis Cárdenas Palomino?
“Creo que lo perdonaría, pero no lo olvidaría porque me echó a perder mi vida (…) mi papá se fue queriendo ver a sus hijos libres y no pudo, eso sí no se lo perdono.
ledz