Son 21 norias que operan en la franja de calizas entre los Ejidos La Luz a La Mina en el municipio de Lerdo provenientes de 14 concesiones legalmente operadas e inscritas, y en su mayoría corresponden a miembros de una sola familia según lo descrito por Miguel Patiño Camacho, Director de Administración del Agua del Organismo de Cuencas Centrales del Norte, a MILENIO.
No obstante, admite la importancia de que se hagan modificaciones jurídicas que le permitan a la Comisión Nacional del Agua tener "más dientes" y ejercer un mayor control y sancionar a quienes sean sorprendidos operando ilegalmente, además de establecer candados al otorgar concesiones o transferencias a fin de fijar tiempos de caducidad para evitar que una sola concesión se mueva a diferentes sitios.
A la petición de información solicitada por MILENIO, en el cuestionario incluía el número de concesiones de uso agrícola que tenían los señores Santiago y Alejandro Gómez Martín, en el que se detalla que ciertamente para ese uso únicamente había inscritas dos concesiones en el Registro Público de Derechos de Agua, pero no se habló, ni se pidió información sobre otros nombres ligados a la misma familia, como tampoco se solicitó información respecto a los pozos “anexos”, donde de una concesión pueden salir hasta cuatro o más aprovechamientos para uso pecuario o doméstico incluso.
Lo anterior se desprende del reportaje publicado por Milenio Laguna el pasado 11 de julio denominado ¡Oasis entre desabasto! Denuncian presunta explotación ilegal de norias agrícolas en Lerdo, en la que avecindados de las comunidades de La Luz y especialistas señalaron que a la vuelta de un año esa zona ha sido explotada de manera indiscriminada por las familia Gómez Martín, que extraen agua las 24 horas los siete días de la semana para el riego de forrajes y para dar de beber a sus becerros y vacas.
De 14 concesiones, cada anexo puede tener hasta cuatro pozos
Al respecto, el funcionario relató efectivamente en la búsqueda de información se han encontrado registros de que en esa zona existen al menos 14 concesiones para usos pecuarios como agrícolas y muchas de estas corresponden a una misma familia, de las que al final se tienen operando 21 norias.
"A nombre de Santiago Gómez Martín nada más tenemos dos concesiones de uso agrícola, pero tenemos más concesiones de usos diferentes, pues normalmente en esta zona son pecuarios y agrícolas, por eso es que nosotros (Conagua) cuando nos solicitaron esa información nos basamos a esa actividad".
¿De quién son entonces esas otras 28 o 29 norias restantes?
- Si es a nombre de las otras personas que nos comentan, de los usuarios, tenemos alrededor de 14 concesiones en esa zona entre los ejidos La Mina y La Luz y son en coincidencia con esos mismos apellidos. Tengo los nombres, pero la información se las podemos dar al solicitarla vía Registro Público de Derechos de Agua.
El funcionario explicó que de estas 14 concesiones, vienen varios anexos y en cada anexo pueden ir desde uno hasta cuatro pozos y en esa zona hay 21 pozos o aprovechamientos instalados y operando.
En ese marco, dijo que la tenencia y operación de dichos aprovechamientos es legal y no se incurre en ninguna irregularidad y las extracciones de agua corresponden al acuífero principal de La Laguna, que si bien está en déficit desde hace muchos años, estos últimos títulos se dan a partir de la regularización de la Ley de Aguas Nacionales en la década de los noventa.
Ley permite traspasar concesiones; si un pozo ya no opera, puede ser repuesto
Cuestionado respecto al por qué entonces estas perforaciones se dieron a partir de un año a la fecha si ya no existen nuevas concesiones, el funcionario de Conagua expresó que lo que se hace es que se mueven las concesiones bajo el concepto de “transmisión de derechos” como sucede también con la renta o enajenación de las mismos entre particulares y todo ello lo permite la ley.
“En el caso de cuando un pozo ya no opera (extrae agua) se le llama reposición o relocalización, es decir, que un usuario que tiene concesión le da agua a otro usuario, debe haber una nueva obra hidráulica o perforación para extraer el volúmen que se transmite o lo mismo ocurre cuando un pozo ya no está en condiciones de ser explotado, lo que se pide es una relocalización o reposición, lo que también es un trámite permitido en la Ley de Aguas Nacionales”, expuso.
¿No resulta incongruente que por un lado se decrete una veda por déficit en el acuífero principal y por otro lado se permita con una misma concesión trasladarse a otros sitios de la región para seguir sobreexplotando?
Soy abogado, no soy técnico y tenemos un área que nos puede explicar mejor ese tema. Lo que yo te expliqué es que el acuífero es un sólo cuerpo de agua que se supone está dentro de varios municipios. Ese acuífero es lo mismo en una zona que se llama La Burbuja y otra zona reglamentada y esas son las que nosotros reglamentamos, pero no se está dando mayor volúmen y sigue siendo el mismo vasito de agua.
¿Que hay que hacer para evitar las explotaciones ilegales de norias? Es decir, se señala también del corredor de Raymundo hacia El Rayo
“Nosotros hemos invitado en diferentes foros a la población, a todos, principalmente a ejidos, a grupos sociales, a que nos apoyen con las denuncias de esas perforaciones”
"Es un bien económico, social y público": Sólo hay tres comisionados para la zona
¿No es muy laxa la ley en cuanto a que falta más control para impedir esa sobreexplotación del acuífero?
La facultad de la Comisión Nacional del Agua, en este caso de Administración del Agua, es la de hacer verificaciones y el cumplimiento de la ley. Nosotros no elaboramos la ley. La ley busca en sentido estricto fomentar el desarrollo, pero también el agua como un bien público tiene diferentes conceptos, ya sea un bien económico, un bien social y un bien ambiental.
El funcionario considera que una manera de poder ejercer un mayor control y freno a las explotaciones ilegales es dando a la dependencia federal “más dientes” para sancionar, más personal y más facultades legales, toda vez que resulta limitado el poder realizar verificaciones cuando únicamente se cuenta con tres inspectores para toda la zona de influencia.
Expuso que se requieren de modificaciones profundas a la Ley de Aguas Nacionales a manera de poner candados a la explotación del agua subterránea, como es por ejemplo fijar periodos de caducidad a cada concesión, para hacer una mejor gestión hídrica.
Sgg.