El fiscal de Veracruz, Jorge Winckler, dijo que las dos menores de edad que fueron abatidas durante un enfrentamiento con personal de la Secretaría de Seguridad Pública en Río Blanco, eran integrantes de una banda ligada a Roberto de los Santos de Jesús, El Bukanas, dedicado al robo de hidrocarburo.
"Los abatidos pertenecían a una célula delictiva, la cual está vinculada al señor Roberto de los Santos de Jesús, El Bukanas, pues incluso en sus cuerpos muestran símbolos de pertenencia a esta célula, como son, entre otros, un tatuaje en forma de revolver que se hicieran Nefertiti "N" y José Eduardo "N", dijo el fiscal en conferencia de prensa.
Reiteró que Nefertiti "N" y Grecia "N", de 16 y 14 años, respectivamente, dieron positivo a la prueba de rodizonato, y negó que los disparos que les causaron la muerte hayan sido a corta distancia.
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"El resultado científico de la prueba de rodizonato resultó positiva en todos ellos; científicamente es comprobable que ellos realizaron disparos en contra de los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública.
"De la necropsia se desprende que la causa de muerte fue por disparos de arma de fuego; con el resultado de la prueba de walker se estableció que los disparos con los que fueron abatidos, ninguno fue efectuado a corta distancia ni a quemarropa", dijo Winckler.
Dijo que en la escena del enfrentamiento localizaron 31 casquillos, de los cuales, 16 fueron disparados por los presuntos delincuentes.
Destacó que la camioneta en la que viajaban las adolescentes, junto con José Eduardo "N", tenía reporte de robo.
Sobre Nefertiti "N" y Grecia "N" dijo que tenían muchos meses que habían abandonado sus estudios, así como la casa de su madre, para poder asociarse con José Eduardo "N", de acuerdo con declaraciones de sus propios familiares.
"En entrevistas directas con familiares, amistades y vecinos de las jóvenes, detallaron que no trabajaban, no estudiaban, eran agresivas y por lo menos una de ellas se autoflagelaba".
Sobre la imagen que circula en redes sociales en las que se ve a una de las jóvenes sentada en el piso, sin ningún arma, frente a un policía y otra en la que está bocabajo en un charco de sangre, dijo que fueron manipuladas.
"Se cuenta con un análisis forense preliminar, sustentado en un software, que indican que la foto fue manipulada a través de un retoque fotográfico".
AA