Las fuertes lluvias que se presentaron el 28 de noviembre en Durango y Sinaloa elementos del Ejército Mexicano se encuentran aplicando en forma ininterrumpida el “PLAN DN-III-E”.
En el estado de Durango tienen presencia en los municipios de Tamazula, Topia, Canelas y Tepehuanes, donde el personal militar evacuó a 105 personas damnificadas de los poblados La Enramada, Guamuchil y Boca del Arroyo debido a la crecida de la afluente del río Canelas, además las tropas llegaron a la comunidad Guacimal, que permanecía incomunicada por las condiciones de los caminos.
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En las comunidades de Zapotes de Valencia, Angostura y El Oro, ubicadas al margen del río Canelas, las tropas lograron evacuar a 80 personas damnificadas y fueron trasladadas a hogares de otros familiares suyos.
La creciente del río Humaya tiró el puente de la comunidad El Barco, del municipio de Tamazula por lo que se evacuó a 115 familias de Boca del Arroyo y Guacimillas, además de Coluta, organizando un refugio temporal en la secundaria El Barco.
Ante la crecida del río Tepehuanes, los efectivos castrenses evacuaron a 483 personas de las colonias Plutarco Elías Calles, Gómez Morín, Estación 1 y Estación 2, que fueron trasladadas a un albergue establecido en la cabecera municipal de Tepehuanes, además de cerrar un tramo de la carretera Tepehuanes-El Tarahumar por seguridad.
Por otra parte, en el estado de Sinaloa las labores son igualmente fundamentales para el auxilio de la población.
Por ejemplo, en el municipio de Mazatlán las tropas del Ejército Mexicano realizan recorridos para brindar seguridad en las comunidades que resultaron afectadas por las lluvias.
También participan con las autoridades de protección civil en el monitoreo de las afluentes y en la limpieza de viviendas que sufrieron daños.
En la comunidad Piaxtla de Abajo, del municipio de San Ignacio, el personal militar lleva a cabo recorridos en áreas susceptibles de presentar afectaciones, efectúa recorridos de revisión y supervisión de los niveles de las afluentes, así como también participa auxiliando a las familias que resultaron afectadas por anegaciones menores en sus viviendas.