Apenas ocho de los comercios que regularmente se instalan afuera de Jardines del Carmen pudieron tener algo de ventas, pues el resto tuvo que retirarse ante la amenaza de que el camposanto no sería abierto.
“Les avisamos que el panteón no se iba abrir y les ofrecimos espacio en alguno de los otros cementerios de la ciudad, pero no aceptaron porque mucho tiene que ver con la tradición que tienen”, declaró Carlos Lara, director de Plazas y Mercados.
Refirió que en algunos casos hubo quienes se mantuvieron en la zona porque no les representa problemas, pues son vecinos de la colonia Santiago Ramírez.
“Ahorita tuvimos ocho y desde ayer otros se retiraron. Entendemos que este tipo de actividades se realizan año con año”.
Recordó que el primer día detectaron hasta 12 vendedores en el exterior y conforme notaron la falta de asistencia de las personas al panteón optaron por retirarse de la zona.
De hecho durante un recorrido por las calles era evidente la falta de actividad comercial e incluso a diferencia de años pasados el tráfico vehicular era posible.
Lara mencionó que en el resto de los panteones no detectaron ninguna irregularidad en cuanto a la venta de flores u otro tipo de materiales que utilizan quienes visitan el panteón.
“Tenemos algunos mercados de flores como en la calle Leandro Valle y Blanco. En los panteones de la ciudad tenemos poco más de 300 vendedores que comercializan flores y otros productos”.
Regularmente, explicó, lo que vigilan es que los comercios o puestos no invadan más allá de lo que tienen asignado y que hayan cubierto la cuota diaria de 27 pesos.
Cabe destacar que los mercados de las flores también tienen una vigilancia constante de parte de la Procuradoría Federal del Consumidor (Profeco), dependencia que desde hace dos semanas arrancó un operativo para la verificación de esos comercios.
En ese sentido, lo que se revisa tiene que ver con que los comercios exhiban los precios de sus productos.