El ex gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina de la Cruz, volvió a dar un revés a la Subprocuraduría Anticorrupción, porque los magistrados del Segundo Tribunal Colegiado confirmaron la resolución del amparo que en febrero del año pasado le concedieron contra la primera vinculación que le impusieron por ejercicio indebido de funciones públicas y delitos contra el patrimonio del estado, por el caso Kia Motors.
Fue la juez Quinto de Distrito quien el 14 de febrero de 2017 le concedió el amparo al ex mandatario, al considerar que la Fiscalía Anticorrupción no precisó las características de cada uno de esos delitos, ni acreditó la plena responsabilidad de los mismos.
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La funcionaria federal emitió su resolución en contra del auto de vinculación que resolvió el 9 de agosto de 2016, el juez de control, Jaime Castañeda Garza.
En la audiencia de ese día, la Subprocuraduría Anticorrupción también señaló a Medina de la Cruz como probable responsable de peculado.
Insistió en que incurrió en los tres delitos porque favoreció con apoyos de más de tres mil millones de pesos a los inversionistas de la armadora Kia Motors, para conseguir que se establecieran en la entidad.
Al resolver, el juez local sólo encontró elementos para vincularlo por ejercicio indebido y delitos contra el patrimonio.
Sin embargo, ahora los magistrados de dicho Tribunal Colegiado echaron abajo esa resolución y fue en definitiva.
Apenas el pasado miércoles 24 de enero se dio a conocer que el ex mandatario estatal había ganado un amparo, con el cual recuperó su rancho ubicado en General Terán y que había sido embargado por la Subprocuraduría Anticorrupción en junio de 2016.