Desde la sombra del árbol hasta la miel que la abeja prepara con su flor, el mezquite es un alimento milenario que hoy se piensa generalmente en la dieta del ganado pero que puede aportar altos valores nutrimentales al ser procesado en harinas o como base de un buen licor.
Así lo explicó la bióloga Esperanza Borjas Villarreal, asesora de emprendedores. Ella misma decidió darle un valor agregado a este árbol lagunero, que también aporta grandes beneficios desde la permacultura en cuanto a la reconstitución de los ecosistemas.
“Tengo una línea de productos que se llama Yolteótl, Corazón de Dios, y aparte de eso me dedico a capacitar a productores para que le den valor agregado a sus productos, de hecho he acompañado a productores de higo, de melón y a los de mezquite. Yo promuevo la producción de harina y licor de mezquite”.
Valor nutrimental del mezquite
La bióloga dijo que por el valor nutrimental que tiene la harina de mezquite, se destaca que es libre de gluten y proporciona energía al ser un sustituto natural del azúcar, mismo que pueden consumir personas que desean llevar dietas más saludables.
“Ahorita para combatir la obesidad se puede sustituir el consumo del azúcar con la harina de mezquite; las primeras culturas la utilizaron para hacer atole y también como endulzante. De hecho parte de la investigación que se hizo permitió el rescate de usos tradicionales del mezquite porque la mayoría lo relaciona como un alimento para ganado, pero es un suplemento que sí hace producir más leche a las cabras pero nuestros ancestros lo utilizaban para alimentarse”.
Esperanza Borjas comentó que el mezquite lagunero, de nombre científico Prosopis laevigata, después de su procesamiento, se puede incluir en las recetas contemporáneas, sin descartar los valores medioambientales que reporta, pues al ser una especie desértica, resiste las altas temperaturas y requiere un gasto mínimo de agua.
¿Qué se puede cocinar con mezquite?
“Es de zonas desérticas y a pesar de que si llueve o no llueve estarán en su época de floración, lo que permite el alimento para los polinizadores, y protegen el suelo también. Con su harina se pueden hacer galletas, hot cakes, panes, pasteles y hasta masa para pizza”.
La harina de mezquite se obtiene de la vaina, mejor conocida como pechita. Una vez lista para cosecharse se desprende del árbol y se pone a secar junto con las semillas, para luego molerse y refinarse dando como resultado un polvo color café claro, muy aromático y dulce. El precio del kilo de harina de mezquite fluctúa entre los 200 y 300 pesos, lo que se considera caro, pero la bióloga apuntó que será mínima la cantidad que se usará como endulzante.
“Es demasiado dulce, es un azúcar natural, cien por ciento orgánica y por eso también la miel producida con flor de mezquite es muy característica en cuanto a su color y su sabor. Como producto puedes realizar muchas cosas como lo son las barras energéticas, de hecho trabajo en una barra energética con mezquite y dátil, y también tenemos el licor del mezquite”.
Este árbol sin duda da identidad a La Laguna, sin embargo ha sido menospreciado y desplazado por especies arbustivas importadas de otras regiones, consideradas invasoras o exóticas, que tienen un alto consumo de agua.
“Desde hace más de 30 años estamos batallando con el problema de la deforestación y metieron otras especies de mezquites, que sí se desarrollan bastante pero la vaina no tiene las características que tiene el mezquite lagunero. Esta es una de las cosas que no dejamos de promover: el uso sustentable, y que se den a conocer todas las bondades de la harina de mezquite para promover su consumo”, finalizó.
EGO