Michoacán se ha convertido en el frente de batalla más caliente entre la Guardia Nacional y grupos de la delincuencia organizada. La entidad, que en los últimos meses ha registrado una pronunciada escalada de homicidios, masacres y desapariciones, concentra el 20 por ciento de este tipo de eventos violentos contabilizados en el país, desde julio de 2019 –cuando se creó este cuerpo de élite– hasta febrero de este año.
De acuerdo con un informe de la Unidad de Transparencia de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC), obtenido por MILENIO, en ese lapso se registraron 346 enfrentamientos entre guardias nacionales e integrantes de la delincuencia organizada en todo el territorio nacional; 41 en el 2019, 163 en el 2020, 122 en el 2021 y 20 en enero y febrero de 2022, con un saldo total de 165 fallecidos.
“La Guardia Nacional se está utilizando para enfrentar a los grupos criminales mejor armados y con mejores capacidades ofensivas. Hay que entender que los grupos criminales tienen en la práctica, a veces, las mismas capacidades armamentísticas, o en ocasiones mayores, que las de las propias autoridades, y es por eso, me parece, existe una Guardia Nacional”, señaló el experto en seguridad Eduardo Guerrero, al ser consultado sobre el tema por MILENIO.
De estos enfrentamientos, 68 tuvieron lugar en Michoacán, principalmente en tierra caliente, donde hay una disputa permanente entre Cárteles Unidos y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), la cual ha provocado que cientos de habitantes tengan que abandonar sus hogares.
En el 2019 se contabilizaron nueve eventos de este tipo, en el 2020 un total de 33, el año pasado 23 y en el primer bimestre de 2022, cinco. Los municipios de este estado - actualmente gobernado por el morenista Alfredo Ramírez Bedolla - que más enfrentamientos registraron son: Uruapan con nueve, Zamora y Aguililla, ambos con siete, así como Tepalcatepec y Cotija con tres.
“Michoacán ha estado en esta espiral de violencia y de enfrentamientos porque, aunque ha lanzado una ofensiva muy fuerte el Cártel Jalisco Nueva Generación, Pueblos Unidos o Cárteles Unidos ha logrado congregar a muchas células locales, que tienen arraigo social en los territorios, y han logrado enfrentarse de manera exitosa al Cártel Jalisco, entonces, es una especie de equilibrio muy violento porque ninguna facción, o ningún grupo criminal logra imponerse al otro. (...) El Cártel de Sinaloa está financiando a Pueblos Unidos para evitar que el CJNG se vuelva hegemónico o dominante en Michoacán”, destacó Eduardo Guerrero.
Según el informe, la segunda entidad con más eventos de este tipo en dicho periodo es Guanajuato con 51, de los cuales 44 se efectuaron entre 2019 y 2020, cuando la entidad registraba una alta incidencia de robo de combustible y una intensa disputa entre el Cártel de Santa Rosa de Lima y el CJNG.
“Guanajuato también es un caso ilustrativo, porque después de que capturaron a José Antonio Yépez Ortiz “El Marro” (ex líder del Cártel de Santa Rosa de Lima), hubo un bajón en la violencia del 20 por ciento en las ejecuciones, pero justamente, también entró Pueblos Unidos a evitar que el Cártel Jalisco terminara dominando el estado.
No han logrado bajar más los homicidios, y sigue siendo el estado más violento del país. Ya lleva cuatro o cinco años Guanajuato incendiado, sin que las autoridades puedan hacer gran cosa, con un problema digamos crónico de enfrentamientos”, detalló el especialista en seguridad.
En tercer lugar, se ubicó el estado de Sonora, gobernado actualmente por el ex secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, con 34 enfrentamientos entre la Guardia Nacional e integrantes de la delincuencia organizada.
“El Cártel de Caborca, fundado hace poco por Caro Quintero, que es un cártel nuevo, ha desequilibrado el panorama en Sonora y ha desatado una buena cantidad de enfrentamientos a lo largo de la costa occidental de Sonora.
Los municipios más afectados han sido Cajeme y Ciudad Obregón, en términos de ejecuciones, y los enfrentamientos también están a la orden del día, y ahí más bien la guerra es entre distintas facciones del Cártel de Sinaloa contra Caborca”, apuntó Guerrero.
De acuerdo con el documento, le siguen Tamaulipas con 28, Guerrero con 25, Jalisco con 19, Nuevo León con 17, Zacatecas con 15, Puebla con 13, Sinaloa con 12, Oaxaca con 11, Veracruz con siete, así como Estado de México, Baja California y San Luis Potosí con seis.
Además, Chihuahua con cinco, Querétaro con cuatro, Chiapas, Nayarit, Tlaxcala y Morelos con tres, Ciudad de México con dos, así como Durango, Hidalgo, Quintana Roo, Tabasco y Baja California Sur con uno.
Saldo de los enfrentamientos
Los enfrentamientos entre elementos de la Guardia Nacional y grupos de la delincuencia organizada –de julio de 2019 a febrero de 2022, han dejado un saldo de 165 fallecidos, 39 uniformados y 126 presuntos delincuentes. Además, 205 lesionados– 160 efectivos y 45 agresores – así como 205 presuntos criminales detenidos.
“La proporción de muertos por el lado de las autoridades y por el bando criminal suena razonable, en términos de que sí ha habido un buen número de miembros de la guardia abatidos, y bueno, claro que el número tiene que ser superior el de presuntos delincuentes, si no, la fuerza del estado nos dejaría con muchas dudas”, consideró el experto en temas de seguridad.
Las entidades en las que más integrantes de la Guardia Nacional han perdido la vida al repeler agresiones son Tamaulipas con cinco, Jalisco y Guerrero con cuatro, así como Baja California, Michoacán y Nuevo León con tres.
Le siguen Chihuahua, Querétaro, Sinaloa, Ciudad de México, Puebla y Guanajuato con dos, así como Veracruz, Chiapas, Sonora, Oaxaca y Zacatecas con uno.
En tanto, la entidad en la que más agresores perdieron la vida al enfrentarse a la Guardia Nacional fue Guanajuato con 42, Michoacán se ubicó en segundo lugar con 21, Zacatecas en tercero con 19, Sonora en cuarto con 10, Jalisco en quinto con ocho y Tamaulipas en sexto con siete.
La lista la completa Guerrero con tres, Oaxaca, Baja California, Durango y Nuevo León con dos, así como Hidalgo, Morelos, Puebla, Nayarit, Quintana Roo, Veracruz, Chihuahua y Sinaloa con uno.
“El gobierno cuando enfrenta a estas células tiene que hacerlo de manera contundente, no tan contundente digamos, en donde tengamos casi cero o muy pocos elementos muertos, pero sí tiene que haber una mayoría de presuntos criminales muertos frente a las autoridades, porque no podemos buscar equidad. La autoridad debe tener supremacía sobre el grupo criminal, entonces parece que lo han logrado” expuso Eduardo Guerrero.
EHR