Mina o crimen: La disyuntiva laboral en la región Carbonífera de Coahuila

En algunos casos, su avocación por la minería les fue heredada por sus padres o abuelos; de otros quedan como ejemplo de la necesidad económica.

Héctor Porras lamenta que hoy los jóvenes tengan esa disyuntiva de no tener la posibilidad de elegir. (Mauricio Román)
Luis Carlos Valdés
Múzquiz, Coahuila. /

La falta de oportunidades laborales es lo que ha hecho que muchos jóvenes se enfrenten a la decisión de elegir el oficio dentro de la industria del carbón, antes que adherirse a las filas del crimen

Héctor Porras Múzquiz, director del Museo de Paleontología y ex trabajador en una mina de carbón, lamenta que hoy los jóvenes tengan esa disyuntiva de no tener la posibilidad de elegir, ante la necesidad de llevar el sustento a sus hogares.

Mauricio, Humberto, Damían Ernesto, Gonzálo, Pedro y Juan Carlos, fueron jóvenes que entregaron su corta vida al oficio de la extracción del carbón, y que perdieron su vida en este accidente hace apenas una semana en Múzquiz, Coahuila

En algunos casos, su avocación por este sector les fue heredada por sus padres o abuelos; de otros quedan como ejemplo de la necesidad económica que impera en esta región ubicada al norte de México, que sobrevive de la extracción del carbón, el comercio y una actividad ganadera en decadencia .

“Yo sé lo que es trabajar al interior de minas de carbón, de florita, son unas condiciones que dan ganas de llorar; pero en esta región, la gente está muy agradecida porque se les da esta oportunidad de trabajo, en una zona donde no hay oportunidades”, aseguró Porras

Y arriesgar la vida en una actividad que poca seguridad les garantiza. Salir de sus casas para dirigirse a un trabajo, en el que se sabe a la hora a la que entran, pero no si podrán regresar con vida a sus hogares

¿Qué hace a un joven no buscar otras alternativas laborales y enfocarse en el carbón?

“Bueno, es que en realidad no tiene futuro; es dedicarse al carbón o ser narcotraficantes o incluso levantarse en armas. No hay otra oportunidad, aquí no tienen otra cosa qué hacer más que trabajar en esto para llevar comida a su casa”. 

Reconoció que sí hay algunas empresas que trabajan con todo el equipo, les dan autorescatarores, los apoyan mucho. Pero recalcó que hay empresas que no tienen las condiciones y arriesgan a sus trabajadores en minas clandestinas donde incluso, levantan carbón de la tierra, con una pala estaba juntando para venderlo, por unos cuantos pesos.

¿Por qué no regular esta actividad? 

“Es algo que todos saben pero que nadie quiere decir. Aquí venían políticos grandes que consiguen grandes concesiones y ponen a trabajar a toda la gente y estos son los resultados. Algunos ni siquiera saben donde queda Muzquiz. Hay muchas personas que consiguen con influencias los contratos de carbón y sirven de coyotes. No entiendo porqué no se hace y se ponga atención a una región como ésta. Si es algo que se puede arreglar, pero esto es cuestión de voluntad, pero no la veo, sólo se ve el beneficio personal”, dijo.

Mineros comparten su testimonio tras rescate de cuerpos

Jose Humberto Méndez Flores, papá de minero fallecido

Yo trabajé mucho tiempo en las minas, pero lo que falta es que haya gente que tenga capacidad de trabajar, que sepan lo que hacen y que logren su labor de inspección y cuidado del personal. Los patrones lo que quieren es el carbón, y no les importa meter a muchachos. Mi hijo acaba de morir y no se lo merecía.

Jesús Daniel Rodríguez Rios, trabajador de mina

Hay que actuar con sangre fría. El agua estaba en contra mía y no se podía sacar a la gente. Estábamos aproximadamente a 140 metros. Lo que quise hacer fue sacar a mi gente; sacamos a diez personas con vida, pero lamentablemente no a todos. La necesidad nos hace jalar y no podemos hacer otra cosa. Es necesario que queden bien las viudas, porque nos tenían con sueldos miserables.

Juan Antonio Rodriguez

Participé en las labores de rescate, algunos de ellos eran conocidos. Me tocó encontrar a muchos de ellos, a los primeros cuatro ayudé para sacarlos. Se siente un ambiente tenso, al encontrarlos, pensamos en sus familias. Al llegar a la mina el viernes, había mucha gente, la Guardia Nacional, equipos de rescate, ayudamos a las labores para sacar a nuestros compañeros.

José Santos Contreras Rebolloso, de 20 años de edad

Nos llamaron, esperamos instrucciones para luego entrar al interior de la mina todo lo que se pudiera, con bombas, mangueras, para tratar de salvarlos, conocí a casi todos de ellos, eran amigos y llegué a trabajar con ellos. A uno de chavalo lo que le interesa es tener trabajo; si es pesado o no, con tal de trabajar, de sacar billete. No todos tienen la facilidad de mantener a sus familias. No todos nacimos con dinero. Lamentablemente aquí el carbón es lo único que hay, por eso se llama la Carbonífera.

EGO

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