Sin verbena popular, sin bandas musicales y sin vítores, la plaza Bicentenario, frente a Palacio de Gobierno, fue testigo de un Grito de Independencia inusual, completamente vacío, sin nayaritas que gritaran ¡Viva México!.
En punto de las 10:30 de la noche, el gobernador Antonio Echevarría García dio el Grito de Independencia sin la presencia de los más de 13 mil nayaritas que se congregaban en la plaza del Poder Ejecutivo, por primera ocasión desde la creación del estado en 1917.
En palacio de gobierno solo la presencia del gobernador y su familia, sin sus dos hijos, miembros del Ejército Mexicano, Marina, representantes del Poder Legislativo, Judicial, todos con la sana distancia y cubrebocas.
La pandemia por covid que mantiene al estado con más de 5 mil 400 contagios y 660 muertes, obligó a las autoridades a cancelar las celebraciones patrias, todo fue de manera virtual, desde la televisión del gobierno estatal, en tan solo 20 minutos se terminó la fiesta popular, un grito en el que se recordaron a los héroes que dieron patria, destacando también el trabajo de elementos de seguridad, maestros, de médicos, enfermeras y personal de las instituciones médicas por su trabajo en esta contingencia.
Atrás quedaron los brindis, los invitados especiales, los artistas de renombre. La plaza Bicentenario, iluminaba la bandera de México, sin templetes, vacía completamente. Bares, cantinas y depósitos de bebidas embriagantes estuvieron cerrados, se aplicó ley seca desde el 13 de septiembre.
Operativos de vigilancia de la Guardia Nacional, policía estatal y municipal, evitaron la presencia de ciudadanos en las calles de los 20 municipios. Las viandas, y bebidas solo se quedaron en casa, en resguardo, sin concentraciones ante el temor de contraer coronavirus.
El vacío de la ciudadanía se replicó en las plazas de las alcaldías de los 20 municipios.
El desfile cívico militar también fue suspendido.
jamj