Restos de Christian, asesinado en Juárez, regresan a Torreón para descansar junto a su abuela

Christián Omar tenía 12 años cuando perdió la vida en la jornada violenta que azotó a Ciudad Juárez; su padre recibió al menos ocho balazos.

Christián fue víctima de la jornada violenta que azotó a ciudad Juárez | Archivo
Jorge Maldonado Varela y Blanca Elizabeth Carmona
Torreón, Coahuila /

El cuerpo del joven de 12 años de edad, Christián Omar Zúñiga, víctima de la jornada violenta en Ciudad Juárez, Chihuahua, partió rumbo a Torreón, Coahuila, donde sus restos descansarán al lado de los de su abuela en un panteón de la ciudad, de acuerdo a información proporcionada por los familiares cercanos.

Fue durante la tarde del pasado lunes cuando familiares y amigos de Christian Omar comenzaron con los servicios funerarios en la capilla Luz Divina en la ciudad fronteriza, para luego partir al mediodía de este martes hacia La Laguna.

Se informó que estaba previsto que llegara tentativamente a la media noche para continuar con servicios funerarios de manera privada y ser despedido durante la tarde de este miércoles.

Janeth Zúñiga, tía del menor que fue víctima de los ataques armados registrados el 11 de agosto, declaró que Christian Omar nació en Ciudad Juárez y su familia es oriunda de Torreón, tierras laguneras que arroparán el cuerpo del adolescente a petición de los padres.

Según la versión oficial de los hechos, el adolescente acompañaba a su papá, Omar Zúñiga, durante su jornada laboral en la tienda ubicada en la carretera a Casas Grandes y calle Salvador Díaz Mirón, cuando hombres armados irrumpieron y realizaron varios disparos que los hirieron de gravedad.

El fiscal general de Chihuahua, Roberto Javier Fierro Duarte, confirmó que el menor perdió la vida en el hospital al no resistir a las lesiones producidas por los proyectiles de arma de fuego, mientras que el padre recibió al menos ocho balazos y su estado de salud es reportado como grave.

Alejandro Morales, abuelo del menor externó que no hay nada que reprocharle al gobierno, pues eso no traerá de vuelta al adolescente que tenía tan solo 12 años de edad y que estaba por entrar al segundo año de secundaria.

“Era especial para mí, era mi nieto consentido, pues de hecho tengo 11 nietos, pero nada más él era hombre. Él era todo para mí y yo era todo para él, éramos uno sólo. Era un niño alegre que pensaba tener un buen futuro, muy trabajador, muy obediente y muy inteligente”, expresó el señor Alejandro.

Sgg.

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