Las tamaulipecas se encuentran entre las mujeres que más sufren violencia en el noviazgo, pues ante el 911 se han recibido este año más de 8 mil llamadas de emergencia donde piden auxilio de las autoridades de seguridad pública por agresiones de su pareja.
De enero a agosto del presente año, 8 mil 137 víctimas fueron atendidas por esta causa, lo que colocó a Tamaulipas como el séptimo estado con mayor registro, solo superado por Baja California con 29,206 casos; Jalisco 19,729; Quintana Roo 19,201; Sonora 14,623; Guanajuato 10,891 y Aguascalientes 8,975.
Así lo informa el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp) en su más reciente corte estadístico al octavo mes del año, donde se observa también que la entidad tamaulipeca está por encima de la media nacional en la tasa de incidencia.
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Y es que el estado tuvo un promedio de 218.9 llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de violencia de pareja, por cada cien mil habitantes, mientras la media nacional es de 139.9; de manera que se posicionó en el lugar diez.
Características de la violencia en el noviazgo
La violencia de pareja está incluida en el Catálogo Nacional de Incidentes de Emergencia y se define como una agresión infligida por la pareja que incluye desde maltrato físico, sexual o emocional y comportamientos controladores.
Se presenta en relaciones de noviazgo y extra maritales, mientras la violencia familiar o doméstica ocurre dentro de un matrimonio establecido o concubinato y se desarrolla al interior del hogar con o sin hijos de por medio.
“Maltrato no es amor”, dijo al respecto el psicólogo Ricardo Flores, quien señaló que en las agresiones de pareja suele haber rasgos de machismo y falta de control de la ira y los impulsos, así como del manejo de la frustración.
“Son relaciones tóxicas donde el agresor muchas veces trae rasgos de machismo fomentado en sus propios hogares, donde se trata al hombre como si fuera superior a las mujeres y creen que ellas son de su propiedad. También se dan casos de hijos excesivamente consentidos y sobreprotegidos, que al crecer no saben controlar la frustración y la ira”.
El especialista destaca que inclusive “hay personalidades narcisistas y hasta con rasgos de psicopatía como trastorno mental, y resultan un foco rojo porque pueden terminar llevando al extremo la violencia de género, hasta llegar al feminicidio”.
Expuso que tratándose de mujeres menores de edad, los padres de familia no deben permitirles que se relacione sentimentalmente con un adulto, pues ni siquiera es para que tengan novio. “Lo ocurrido en Altamira con el crimen de la adolescente de 14 años es una tragedia que debe crear conciencia para evitar más víctimas”, finalizó.
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SJHN