Nada se sabía del cártel Nueva Plaza hasta que la Fiscalía reveló que el Cártel Jalisco Nueva Generación confundió a tres estudiantes de cine con integrantes de su grupo rival, por lo que fueron levantados, asesinados y sus cuerpos disueltos en ácido.
Dos presuntos integrantes del cártel Nueva Plaza son identificados por las autoridades como Carlos Enrique Sánchez Martínez, El Cholo, y Diego Gabriel Mejía, quien es el propietario de una finca ubicada en Tonalá, conocida como "La Cabaña", donde fue detenido en julio de 2015.
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El Cholo fungía como uno de los mandos del cártel de Jalisco y era brazo derecho de Nemesio Oseguera, El Mencho, líder del grupo criminal.
De acuerdo con información que la Fiscalía dio a conocer en noviembre del año pasado, El Cholo ordenó asesinar a un colombiano que fungía como presunto operador financiero de El Mencho en marzo de 2017.
A partir de ese crimen ocurrido en Vallarta, El Cholo dejó de pertenecer a la organización criminal de El Mencho y comenzó una disputa entre Nueva Plaza y el cártel Nueva Generación.
Por su parte, Diego Gabriel Mejía fue arrestado con otros cuatro hombres: el colombiano Brayan Hernán Almario; Miguel Ángel Goche Fernández; Hugo Israel Palomera y José Jonathan Cárdenas Sánchez. La policía también aseguró armamento y dos vehículos.
Desde hace tres años, Mejía está preso; sin embargo, un mando del cártel de Jalisco recibió información de que ya había sido liberado, por lo que ordenó a un grupo de hombres vigilar su casa conocida como "La Cabaña".
El 19 de marzo, los criminales del cártel de Jalisco vieron a un grupo de jóvenes en la vivienda y esperaron a que se fueran del lugar para interceptarlos.
Entre las 19:35 y 20:05 horas, Salomón y Juan Carlos, apodado El Canzón, del cártel de Jalisco, se identificaron como personal de la Fiscalía y ordenaron a los jóvenes tirarse al piso.
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Del grupo de jóvenes se llevaron a Javier Salomón Aceves Gastélum, Marco Francisco García Ávalos y Jesús Daniel Díaz García, estudiantes de cine que habían ido a grabar un video.
Edna Judith, tía de Salomón, les había prestado "La Cabaña" para hicieran su tarea. Ella fungía presuntamente como prestanombres de Diego Gabriel Mejía. Sin saber que estaban en una zona de peligro, los jóvenes hicieron su trabajo escolar en ese lugar.
Los tres estudiantes fueron llevados a la fuerza a una finca, donde fueron torturados e "interrogados", a fin de sacarles información sobre el cártel Nueva Plaza.
Javier Salomón murió debido a los golpes que recibió durante el "interrogatorio". Después los delincuentes asesinaron a los otros dos estudiantes.
Posteriormente, los criminales llevaron los tres cuerpos a otra casa en Tonalá, donde fueron disueltos en ácido para eliminar evidencias.
Dos de los integrantes que participaron en el asesinato fueron detenidos; sin embargo, otro identificado como El Canzón, fue ejecutado en Guadalajara, Jalisco.
jbh