El Obispo de la Diócesis de Saltillo, Raúl Vera López, expresó su desacuerdo con la construcción de Ciudad Derramadero al sur de la ciudad, para la cual se avaló la explotación de un acuífero que abastece al municipio de Parras.
Durante la celebración eucarística para la imposición de la ceniza, Monseñor, expuso que el estudio realizado por Aguas de Saltillo sobre la factibilidad y suficiencia de suministro, que además fue validada por la Conagua, no concuerda con la realidad que viven las familias campesinas de la región.
Expresó su rechazo a la extracción de agua, que se pretende hacer del acuífero que afectará directamente a Parras, General Cepeda, Ramos Arizpe, Arteaga y Saltillo, al tiempo que aseguró que la Diócesis estará con los campesinos en la lucha por el territorio y la defensa de la vida.
“Está sobreexplotado el acuífero porque han vendido el agua, desde la privatización del agua en Saltillo la han vendido porque ya no es dueño el municipio del agua, sino esa empresa ha vendido el agua para las empresas, la cantidad de agua que quieran la han vendido”, dijo.