En una casa de adobe, con techos de lámina y vigas, vive un matrimonio de adultos mayores, conformado por Martín Guajardo de 74 años y Socorro González de 73, quienes junto a su nieta de 13 años, han pasado días de angustia, donde su tranquilidad se aleja debido a la vulnerabilidad de su hogar ante la lluvia.
Las actuales condiciones climáticas han afectado su vida, pues además de que el agua entró hasta su hogar, por las recientes inundaciones en una de las vialidades de San José de Viñedo, Gómez Palacio, de donde son originarios, también se trasmina por el techo durante las lluvias.
Ellos viven con una pensión mensual de 2 mil pesos, “y como dicen, con la caridad del vecino”, comenta Socorro con lágrimas en los ojos, al encontrarse en una situación de impotencia y desesperación por el momento que están viviendo, pues no tienen forma de solucionar estos problemas.
Recordó que hace un año se derrumbó su cocina y aunque su esposo le está haciendo una nueva poco a poco, su avanzada edad y las lesiones que tiene a consecuencia de un accidente que tuvo en años pasados, no le permiten avanzar rápido, sin embargo el principal problema es que no han conseguido más recursos para adelantar la construcción.
“A veces tenemos pa comer y a veces no, pero aquí las vecinas nos hacen el favor” enfatizó.
La inundación de su casa provocó que su refrigerador se descompusiera y que la única parrilla que tenían, en la cual cocinaban, hiciera corto, además de que otros de sus muebles que tenía en el piso terminaron mojados y dañados.
El señor Martín mencionó que se conformaría con que lo apoyaran con hules o lonas, aunque sea prestadas, para que el agua ya no siga cayendo al interior de su casa y puedan descansar con mayor tranquilidad, en donde lo han hecho por más de 70 años.