Marco Rascón, precandidato del Partido Humanista a la Jefatura de Gobierno, aseguró que su objetivo central no es mantener el registro de este partido, y resaltó: "no vamos por conseguir votos, es un proyecto que va más allá, es algo de largo aliento".
En conferencia de prensa, el aspirante que su prioridad será lograr una fuerza importante en el primer Congreso capitalino, porque ahí se determinarán las leyes reglamentarias que regirán la vida inmediata de los habitantes, tras la publicación de la Constitución Política de la Ciudad de México.
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Enfatizó que los habitantes necesitan recobrar la perspectiva y visión de futuro en temas urgentes como: seguridad, abasto de agua, medio ambiente, movilidad, diversidad, sustentabilidad económica y desarrollo urbano.
"Los Humanistas vamos a arriesgar para convencer. Quien quiera una candidatura segura, les digo que aquí no hay. Habremos de trabajar y convencer. La propuesta humanista es solo para visionarios", señaló.
Rascón, conocido por su personaje de Súper Barrio, afirmó que la izquierda que dio sustento a dos de décadas de gobierno está dividida y enfrentada por lo que es incapaz de resolver los verdaderos problemas de la capital, y es que dijo "el PRD y Morena están en un proceso de descomposición política y en una etapa de disputa, muy lejos de retomar la relación con las personas y atender la nueva realidad".
Manifestó que su partido no tiene miedo de coincidir en propuestas que tengan sentido aunque provengan de otras fuerzas políticas, pero deben ser realistas, y dijo que esto no debe significar confrontaciones o conflictos.
"Quienes participamos en la democratización de la ciudad vemos con asombro que los partidos de izquierda son opositores de su propia obra. Quienes nos gobiernan ya perdieron la brújula, se les acabaron las ideas y no tienen unidad, esa es una gran tragedia", señaló.
Finalmente recalcó que la Ciudad de México requiere que los habitantes sean escuchados, así como lograr acuerdos para lograr un gran futuro.
EB