Una enorme mancha de aceite por derrame de combustible de la Terminal de Marítima Pajaritos de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Coatzacoalcos, Veracruz, fue denunciada por pescadores ribereños el lunes 11 de julio.
Los trabajadores del mar difundieron videos donde se observa la mancha iridiscente del combustible que alcanzó a llegar al caudaloso afluente del municipio petrolero del sur de Veracruz.
La huella de la posible fuga llevó a los pescadores hasta la Terminal de almacenamiento de combustibles Pajaritos.
En ese mismo complejo de Pemex, hace un mes, el 4 de junio, se hundió el chalán 571, que estaba amarrado entre los muelles uno y dos de la Laguna de Pajaritos, provocando un enorme derrame del combustible que contenía la embarcación, aún después de varios años en desuso.
En ese caso, se perforaron las cámaras de flotación que se ubican en los extremos de la embarcación y que están llenos de aire.
Al perforarse por la corrosión le entró agua (que se fue a pique) y el crudo que estaba en los tanques, al hundirse le entró también agua y salió a la superficie.
Al lado de este chalán hay otro también abandonado, que pudiera seguir la misma suerte y hundirse.
En el río Cazones, en la zona norte, el mismo lunes 11 de julio fue reportado un derrame de hidrocarburo que ha dejado un mancha aceitosa de varios kilómetros de extensión, desde la comunidad de San Miguel Mecatepec, en el municipio de Tihuatlán, hasta colonias de Poza Rica y Coatzintla. Protección Civil de Tihuatlán y Poza Rica constataron el reporte y ya le han notificado a Pemex.
El olor a combustible es intenso y el producto pudiera proceder del pozo 70 en la comunidad de San Miguel Mecatepec o de las instalaciones del Complejo Petroquímico de Poza Rica.
El agente municipal de la localidad de San Miguel Mecatepec, Adolfo Cruz Muñoz, indicó que trabajadores petroleros iniciaron acciones para evitar que el agua contaminada siga llegando hasta el mar, mediante la colocación de un dique de grava, pero los trabajos de limpieza no se han realizado.
Temen se presente mortandad de especies que hay en el río, que, además, abastece de agua a pobladores de la zona.
Este año ya se han presentado siete eventos similares en las localidades de Plan de Ayala, Totolapa y Zacate Colorado.
La semana pasada, el 2 de julio, en esa misma región norte, pero en Papantla, fue denunciado un caso de derrame aún peor, que ocasionó daños en cultivos de cítricos y plátano principalmente.
Fueron afectadas 10 hectáreas de terreno y algunos arroyos.
La fuga de hidrocarburo se registró en un pozo al fracturarse la línea principal del Pozo Santa Águeda 223, que se encuentra en etapa de perforación.
Las afectaciones se dieron en las localidades de Adolfo Ruiz Cortines y Casa Blanca, cuyos pobladores escucharon un fuerte estallido y, posteriormente, se vio un enorme chorro de crudo con varios metros de altura y un fuerte olor a hidrocarburo.
Se derramaron, supuestamente, más de 3 millones de litros de aceite crudo. Los trabajos de reparación tomaron varios días.
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En ninguno de los casos hubo comunicado oficial sobre lo sucedido y quienes informaron fueron autoridades municipales de protección civil, agentes municipales o afectados como pescadores y productores del campo.
EHR