En Oaxaca se instaló un enmallado perimetral para resguardar el polígono de la zona arqueológica de Monte Albán, y se inició un plan de reforestación de 50 mil árboles en 500 hectáreas para resguardar y proteger la zona de invasiones.
El gobernador Salomon Jara encabezó un ritual prehispánico para dar inicio al mega tequio, con el que se busca recuperar y preservar el área natural alrededor del polígono de las ruinas de cultura zapoteca ubicada en el cerro del jaguar.
Durante la actividad, el gobernador señaló que esta acción forma parte de los trabajos para contribuir en la mitigación de los efectos del cambio climático, así como en el cuidado del medio ambiente.
“Venimos a emprender una gran cruzada para la reforestación de este Polígono mediante una labor solidaria que forma parte de nuestra herencia ancestral, el tequio, actividad que nuestro Gobierno rescató para contribuir juntos al bienestar común”, expresó.
En este sentido, Jara dijo que en las jornadas de tequio comunitario se invitó a los diferentes sectores de la sociedad para que se sumen al cuidado de los suelos, reforestan y fomentan la sana convivencia social de las personas.
La subsecretaria de Tequio e Inclusión para el Bienestar, Fernanda Schmidt Ruiz dio a conocer que en esta primera etapa se reforestarán 500 hectáreas que contemplan cuatro parajes de San Pedro Ixtlahuaca y uno de Santa Cruz Xoxocotlán con el objetivo de recuperar la fertilidad de esta tierra de los Valles Centrales.
“El tequio refleja la importancia de la colaboración y trabajo en equipo, por ello esta administración la adoptó como una política pública; juntas y juntos, gobierno y población, lograremos que Monte Albán siga floreciendo”, dijo.
En tanto el Secretario de Fomento Agropecuario Victor Lopez Leyva detalló que el plan es reforestar 50 mil árboles en 500 hectáreas en una primera etapa. Asimismo se revisó la terminación de la instalación del mallado que protege el polígono de la zona arqueológica que tuvo una inversión de 8 millones de pesos y abarca una línea perimetral de 10 kilómetros.
La malla ofrece protección y resguardo a la zona, que además es vigilada de presencia permanente de la policía, la Guardia Nacional.
Respeto a la tierra
En las tareas de reforestación participaron shamanes y curanderos tradicionales que encabezaron un singular ritual para pedir permiso a la tierra para iniciar la siembra de árboles endémicos en la poligonal de Monte Albán como copal, el casahuate, el guamuchil y el pochote.
Los ritualistas advirtieron que hay que pedir permiso a la tierra para sembrar nueva vida, a la vez que se bautizaron con nombres cada una de las especies que se reforestaron para generar la simbiosis entre la raza humana y las especies vegetales.
Por ello se hizo sonar el caracol y se emuló en gruñido del jaguar, a la vez que se rociaron especies y se quemó copal.
- Te recomendamos Migrantes de la “Caravana de Jesucristo” llegan a Zanatepec, Oaxaca; avanzan en su ruta hacia EU Estados