Con el firme objetivo de truncar los riesgos de accidentes que eventualmente se registran en las albercas, quintas y otros centros de recreación existentes, sobre todo si no se atienden las medidas reglamentarias de prevención a favor del orden y la seguridad de sus usuarios, el Ayuntamiento de Torreón a través de la Dirección de Protección Civil y Bomberos de manera permanente supervisa este tipo de espacios.
- Te recomendamos La Laguna trabaja en impulsar la cultura de Protección Civil Estados
Se trata de un trabajo en el que comenzaron a redoblar esfuerzos antes del pasado 21 de marzo, Día de la Primavera, “el operativo lo comenzamos en febrero aproximadamente para darles tiempo a los propietarios a subsanar los señalamientos que nosotros les hicimos de acuerdo a la inspección que realizamos”.
Así se expresó el titular de la dependencia municipal, Jorge Luis Juárez Llanas, quien informó que por fortuna, hasta ahora en las revisiones realizadas no se han encontrado anomalías.
Señaló que es primordial que los propietarios hagan conciencia que el servicio que ofrecen debe tener el visto bueno de Protección Civil en cuanto a aspectos de seguridad, tales como tener en perfectas condiciones todo lo relacionado a las instalaciones eléctricas, contar con un botiquín de primeros auxilios, teléfonos de emergencia a la vista, la debida señalización de la profundidad de las albercas, y que cuenten con salvavidas, entre otras cosas.
En ese sentido invitó a los dueños de balnearios, albercas y quintas a que se acerquen a la dependencia para que realicen una revisión y el personal pueda señalarles las áreas de oportunidad en su caso, para que puedan mejorar, con la finalidad de que no se presente ningún incidente dentro de su predio.
Hizo un llamado también a los usuarios para que respeten el reglamento de Protección Civil y prioricen su integridad y la de sus familiares, haciendo buen uso de estos complejos.
Juárez Llanas, informó que se tiene un padrón de un poco más de 400 salones de eventos, de ese total, 250 son quintas con albercas.
Explicó que actualmente hicieron un operativo igual que el año pasado, antes de que abrieran las albercas, aunque aclaró que las quintas abren todo el año, “pero por temporada que es lo más complicado, es a las albercas, donde la gente por la temperatura ambiente o recreación, acude mucho a dichos lugares”.
En la inspección que se realizó en las 250 quintas con albercas, se llevaron a cabo revisiones importantes para buscar lo que son los riesgos que hay en estas, principalmente en la parte eléctrica,
“Por ejemplo, si existe electricidad expuesta cerca de la parte de la alberca es un riesgo importante. También en la parte de la cocina que es donde calientan alimentos, por lo referente al gas también se checa”.
Otro aspecto que también se verifica es la parte de la capacitación en primeros auxilios que debe tener la gente que está cerca de la alberca y en la parte de incendios que es lo más complicado.
También lo referente a la señalética, se inspecciona; es decir, afortunadamente en la mayor parte, si no es que en todas las albercas, tienen una área aparte para los pequeños y una parte para los más grandes, pero deben estar señalizadas en cuestión de lo que es la profundidad.
“Les pedimos que esté en el piso o en la parte de los lados o que tenga algo que identifique que de tal a cual espacio es una altura considerable para que la gente que no sepa nadar o los chiquitos, no se metan ahí”.
“Principalmente esto es lo que estamos checando en las albercas, pero en realidad no hubo tanta área de oportunidad y al área de oportunidad que hubo, sí se le dio solución, hicimos una primera visita, les dimos ciertos días para que lo subsanaran y regresamos a checar para ver sí se acató la recomendación, que era lo que más nos impacta dentro de la parte de la alberca y la idea es que si pasa una emergencia, que ellos lo puedan controlar”.
Lo más complicado es el ahogamiento y se da mucho en los más vulnerables que son los niños chiquitos, “sí es algo que nos preocupa mucho, esperemos que en este tema no se presente un problema grave, no ha habido nada de marzo a la fecha, no tenemos reportes importantes en este tipo de giros relacionado con eso”, comentó.
Lerdo: se exige señalética
María Isabel Macías Sifuentes, directora de Protección Civil en Lerdo, informó que en todas las quintas y albercas públicas del municipio, se hace una inspección minuciosa para evitar en lo posible que haya ahogados.
“Yo tengo el dato que maneja Prevención Social que son más de 300 las registradas, aunque probablemente hay más en Lerdo, lo malo es que me comentan ellos que cuando van a hacer revisión, los de esas quintas dicen que es privada, por eso se complica”.
Cuando acuden a la dependencia a pedir el dictamen de Protección Civil, la solicitud principal es que se cuente con la señalética donde se indica la profundidad de las albercas.
“Hay muchas personas que vienen de manera personal a solicitar el dictamen, nosotros vamos y revisamos que tenga la profundidad indicada e igualmente que tengan extintores y señaléticas de entradas y salidas de emergencia”, dijo.
La profundidad máxima en la alberca es de un metro 80 y el chapoteadero, de un metro, y en este último también debe estar marcado este dato, así como un reglamento donde estén las medidas de seguridad que deben tener en cuenta los usuarios, donde una de las principales, es no descuidar a los niños”.
Enfatizó sobre las recomendaciones que se deben tomar en cuenta cuando se visita una de ellas, “lo primero sería revisar si el piso es resbaloso, sí tiene medidas de seguridad. Los niños no miden el peligro y son inquietos”.
La reglamentación está a la vista, pues el reglamento de Protección Civil dice que cualquier establecimiento, institución o comercio debe contar con su programa interno y dictamen de seguridad según sea el caso.
“Entonces en las quintas aunque no tengan alberca, deben contar con sus dictamen de seguridad y contar con estas medidas”, dijo.
Reglamento, obligatorio en GP
Santiago Rodríguez, titular de la Dirección de Protección Civil de Gómez Palacio, informó que se tienen un padrón aproximado de unas 70 quintas con albercas, las cuales monitorean para que cumplan con su reglamento, cuando menos con las medidas básicas.
“Que cuenten con uno o dos extintores de acuerdo a las dimensiones de la quinta de la alberca, que tenga la señalética, que cuente también con una lona en la que se especifiquen los lineamientos para introducirse a la alberca, donde nos marca la profundidad y los riesgos que puede haber dentro de la alberca”, dijo.
Expuso que es una obligación contar con lo anterior y en caso de que no lo tengan, “no se les dará el dictamen de liberación, por no contar con sus medidas básicas de seguridad, por ende, no se les va a autorizar la licencia de funcionamiento”.
Expuso que cuando han encontrado que les falta alguna medida de seguridad, “se les hace la invitación para que cumplan con ellas, y posteriormente, les volvemos a visitar para que se lleven a cabo los señalamientos solicitados y que cumplan con ellos”.
Expuso que básicamente en cuanto los protocolos de seguridad, está la prohibición correr alrededor de la alberca, el no aventarse, “hay partes donde deben de contar con rampa para minusválidos, donde tienen que contar con cinta antiderrapante para evitar caídas y cuando son partes techadas, contar con detectores de humo en caso que hubiera cualquier incendio”.
En el caso de la cloración del agua, esto se lleva a cabo en coordinación con la Cofepris o con Salud Municipal para que ellos vean que cumplan con los lineamientos.
“Aunque nosotros al hacer la revisión de las medidas básicas de seguridad, les pedimos principalmente la química del agua, si se está llevando a cabo el constante mantenimiento, ya que como todos sabemos, se maneja a través del PH para saber las condiciones del agua, entonces entran dichas dependencias y hacen su cometido”, dijo.
“Es un hecho de que si no cumplen con medidas de seguridad, con el dictamen de Protección Civil, no se les facilita la licencia de funcionamiento”, expuso Santiago Rodríguez
cale