El vice coordinador de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Maurilio Hernández González, informó que el Fondo de Reserva que tenía el Issemym para cubrir el déficit financiero que registraba cada año ya se agotó, por lo cual el gobierno estatal tuvo que presupuestar un subsidio emergente para garantizar el pago de pensiones y el funcionamiento del Instituto durante este 2024, con un monto extra de 6 mil millones de pesos.
Esto, dijo, obliga a restructurar todo el marco jurídico del Instituto este año para hacerlo tripartita, de manera que el gobierno estatal asuma por ley la obligación de apoyarlo presupuestalmente cada año, como lo hace el gobierno federal con el Seguro Social, para que el Issemym no caiga en números rojos y evitar que se deteriore más el servicio de salud para la derechohabiencia.
En entrevista, el morenista indicó que el poder Ejecutivo de la anterior administración incumplió su compromiso de presentar una nueva propuesta de ley y para evitar problemas hizo lo más fácil, tomar dinero de la reserva y así “pateó el bote” durante tres o cuatro años, sin asumir su responsabilidad, dejándola toda a la nueva administración.
Por eso, incrementaron el presupuesto del Instituto, exclusivamente para el pago de pensiones, de 20 mil 834.8 millones de pesos a 26 mil 712.2 millones, porque el gobierno estatal asume este año el costo de no tener una reserva financiera para pagar todas las pensiones que están en marcha.
Explicó que esto no es un problema derivado de haber abrogado la Ley Issemym hace cuatro años, sino de no haber echado a andar una completa reestructura que no viera como única salida cargarle la mano a la burocracia con el aumento de cuotas, porque de por si los trabajadores ya contribuyen con 12 por ciento de su sueldo al sostenimiento del Instituto, como para que se les sume un incremento de 5 por ciento, pues eso significaría una reducción salarial.
Desde hace tiempo, recordó, se le planteó al gobierno la necesidad de que, al igual al gobierno federal asumiera parte del costo, pero argumentó que ya lo hacía al pagar cuotas como patrón y nunca destinó más recursos al seguro social de la burocracia mexiquense.
No al aumento de cuotas
La salida, dijo, no es aumentar las cuotas al trabajador, porque el pago que hace ya es suficiente, sino buscar otras alternativas y que el gobierno estatal destine cada año lo que hace falta para cubrir los gastos. Ya se demostró que haciendo economías se puede asumir esa responsabilidad.
Se tendrá que hacer nuevos estudios actuariales y definir las opciones, ver el tema de la edad y reconocer que el aumento de la esperanza de vida obliga a replantear a qué edad se sebe retirar un trabajador, pero con estudios serios, no con ocurrencias o demagogias.
“Una reforma que implique una reingeniería. Se subsidio este año, porque legalmente la figura con la que funciona el ISSEMyM es bipartita, a diferencia del IMSS que es tripartita, a cargo del gobierno, el trabajador y el empleador” apuntó.
Tampoco se puede pensar que con este subsidio gubernamental se va a resolver el problema, porque cada día hay menos trabajadores al servicio del estado, más personas jubiladas que cobran durante más tiempo una pensión y porque se debe garantizar un mejor servicio, con mayor y mejor equipo, medicamento, personal capacitado, entre otros.
Por los tiempos y temas en agenda, Maurilio Hernández consideró que no será posible atender el tema en esta Legislatura, pero si se debe iniciar el análisis, para que la siguiente lo resuelva antes de la llegada del 2025, donde se requerirán nuevas medidas.
RR