En lo que va de 2019 se han atendido en Coahuila 6 mil 951 nuevos casos de mujeres que denuncian algún tipo de violencia, en su mayoría psicológica, por lo que los indicadores señalan que en esta entidad seis de cada 10 mujeres han sido víctimas de algún tipo de maltrato, principalmente en el ámbito familiar.
Katy Salinas Pérez, directora del Instituto Coahuilense de las Mujeres, dio a conocer que como resultado de las atenciones que se han hecho en los cinco Centros de Justicia y Empoderamiento del estado, se registran otras 19 mil 013 atenciones a mujeres que denunciaron en años anteriores, pero se sujetaron a un tratamiento subsecuente.
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En Coahuila además de los cinco Centros de Justicia ubicados en Saltillo, Torreón, Matamoros, Frontera y Acuña se instalaron 13 módulos de atención en aquellos municipios en donde no se tienen oficinas, y en los cuales se recibieron 770 casos de violencia.
Explicó que el 98 por ciento de los casos tienen que ver directamente con cuestiones familiares, en donde el 80 por ciento denuncia maltrato psicológico, el 30 por ciento físico, y 20 por ciento económico, en los dos últimos casos, en razón de que se ubican en varios tipos.
Aclaró que a los Centros no acuden personas del sexo masculino y cuando eso ocurre son canalizados a otras instituciones como la Fiscalía General del estado a fin de que presenten la denuncia correspondiente.
Sobre la desigualdad que se han señalado respecto a la justicia en favor de la mujer frente a los casos de violencia contra el hombre, Salinas Pérez justificó la falta de Centros de Justicia para ese género al señalar que se trata de una estrategia derivada de un tratado internacional.
“¿Por qué no existe una institución específica para el hombre? Este debate se termina si analizamos lo que contiene la CEDAW en sus siglas en inglés, que es la Convención sobre la eliminación sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, la cual fue firmada en 1979 y en México entró en vigor en mayo de 1981”.
Detalló que en su artículo cuarto los estados que firman se comprometen a llevar a cabo las medidas especiales de carácter temporal que van dirigidas a las mujeres y permanecerán mientras se logre superar su estado de vulnerabilidad.
“Ese artículo establece que esas medidas de ninguna manera se van a considerar discriminatorias para los hombres. Como la balanza esta desequilibrada actualmente, el Estado tiene que tomar una medida especial de carácter temporal como fue crear instituciones para que las mujeres salgan a denunciar”, puntualizó.
Salinas Pérez añadió que actualmente son las mujeres el mayor grupo de la población que sufre violencia en sus relaciones interpersonales, y es a través de este tratado y las acciones de gobierno en donde se busca terminar con esa desigualdad y vulnerabilidad.
Expuso que cuando el hombre se sienta vulnerado, incluso por parte de su pareja mujer, debe presentar la denuncia correspondiente, y aclaró que tanto el Instituto de las Mujeres como el Centro de Empoderamiento, sólo están facultadas para orientar y asesorar a las mujeres cuando solicitan apoyo a esta institución, pero no pueden juzgar los casos, ya que corresponde a otra autoridad determinar cuál de las dos partes tiene la razón.