Para minimizar el miedo y el impacto psicológico que genera una cirugía en los niños, los pacientes de pediatría del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Nogales, Sonora, llegan al quirófano jugando y conduciendo carritos montables.
Así, en lugar de ingresar a la sala donde los van a operar nerviosos acostados sobre una camilla, lo hacen sonrientes a bordo de un Mercedes Benz convertible de color rosa o rojo.
La idea surgió de trabajadoras del Hospital General de Zona (HGZ) Nº5, entre ellas Fabiola Rentería Fimbres, quien tras una experiencia personal pensó en cómo podrían contribuir al bienestar integral de los pequeños pacientes, y buscó los recursos y el apoyo necesario para llevar a cabo la estrategia a la que llamaron “llegar con estilo al quirófano”.
El HGZ Nº5, Vicente Rojas Contreras, aseguró que la técnica ha funcionado a la perfección, aminora los nervios ante una situación que causa ansiedad, pues llegar sobre ruedas a su cirugía se convierte en un juego y en un momento agradable para ellos.
“El tratamiento para el niño en un hospital es muy estresante. Vimos varios estudios que ya se han hecho en España, en Dinamarca, en Estados Unidos, e incluso en la Ciudad de México, sobre cómo disminuir el estrés en los niños hospitalizados”, explicó Vicente Rojas Contreras, director del Hospital del IMSS en Nogales.
RLO