Madres y padres de familia sonorenses consideran que la vacunación de maestros anunciada para principios de mayo no les brinda la suficiente seguridad para que sus hijos regresen a las aulas, mientras los maestros sindicalizados insisten en que las clases presenciales deben ser únicamente con el semáforo de covid-19 en verde.
Luego de que este viernes la Secretaría de Salud anunciara que del 5 al 11 de mayo iniciará la inoculación de maestros de escuelas públicas y particulares en Sonora, para reactivar los planteles educativos 15 días después, la mayoría de los padres de familia se mostraron decididos a que sus hijos continúen sus clases en línea.
“Ya casi acaban el curso deberían acabarlo así y el próximo ciclo hacerlo ya presencial, yo no mandaría a mis hijos”, comentó Claudia en el grupo de Whatsapp de su hijo de segundo grado de primaria donde las madres discutían si los enviarían o no a la escuela.
Con ella coincidió Nayeli, otra mamá que se encuentra entre la población de alto riesgo, y dijo esperar que “cuando las clases ya sean presenciales ya esté la vacuna para los niños sin consecuencias, y se les vacune junto a sus padres si es necesario en las mismas escuelas”.
Los padres de familia se mostraron preocupados por que ocurra un contagio masivo de niños, sobretodo luego de que la Secretaría de Salud estatal informara sobre varios casos de problemas cardiacos detectados en niños que padecieron covid-19 incluso siendo asintomáticos.
“Les hace mucha falta el reunirse en la escuela, extrañan a sus compañeros, pero lo principal ahorita es no exponerlos a un contagio”, destacaron.
Sin embargo, algunas madres como Yajaira, sí estuvieron de acuerdo con enviar a sus hijos a las aulas “para empezar a regularizar su horario, y sobretodo porque trabajan y aprenden más de forma presencial que cuando yo les doy clases en casa”.
ledz