Huracán 'Otis' destrozó el sistema de seguridad pública de Acapulco: SSP Guerrero

El titular de la Secretaría de Seguridad Pública solicitó un financiamiento extraordinario para la urgente reactivación de los servicios afectados.

SSP de Guerrero solicitó mil 91 millones para reparar estragos de 'Otis' en servicios de seguridad | Rogelio Agustín
Rogelio Agustín Esteban
Guerrero, México /

El huracán Otis causó daños significativos en los equipos de videovigilancia, telecomunicaciones, cuarteles de la Policía del Estado y el Centro de Rehabilitación Social (Cereso) de Acapulco

Ante las comisiones del Congreso local, Evelio Méndez Gómez, titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), solicitó un financiamiento extraordinario de mil 91 millones de pesos para la urgente reactivación de los servicios y equipos afectados.

Durante la comparecencia, realizada en privado ante las comisiones unidas de Seguridad Pública y Derechos Humanos, el capitán Méndez Gómez explicó el impacto del huracán de categoría 5 en el sistema de seguridad pública estatal. 

“El huracán Otis dañó la infraestructura y equipos de videovigilancia del C-5 de Acapulco, el sistema de telecomunicaciones, los cuarteles de la Policía Estatal y del Centro de Reinserción Social, todos sufrieron daños, que en su gran mayoría no tienen reparación”, dijo el titular de la SSP.

De acuerdo con el diagnóstico que el titular presentó, los daños ascienden a mil 91 millones 556 mil 888 pesos

“Por eso, al comparecer ante este Congreso, solicito apoyo institucional para gestionar recursos extraordinarios para la reactivación urgente de estos servicios, que atienden llamadas de emergencia y denuncia anónima, principalmente en Acapulco, Costa Chica y Costa Grande”.

Las reparaciones necesarias tienen como objetivo garantizar el servicio de telecomunicaciones para las operaciones de las instituciones policiales en esas regiones. 

La exposición detallada de los daños causados por el huracán al sistema de Seguridad Pública se transmitió a través de la plataforma oficial del Congreso, como permitieron los diputados.

Al inicio de la comparecencia, Joaquín Badillo Escamilla, presidente de la Comisión de Seguridad Pública, anunció que los trabajos se llevarían a cabo en privado

Por lo tanto, solicitó a todas las personas ajenas a los diputados y sus colaboradores abandonar la sala José Francisco Ruiz Massieu.

También pidió apagar cualquier dispositivo que pudiera grabar o transmitir lo discutido, argumentando razones de seguridad para el estado y el país.

MO

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