La reconstrucción de viviendas y escuelas públicas de Chiapas ha avanzado a paso lento en estos tres años del terremoto magnitud 8.2, el cual tuvo como epicentro la zona de Pijijiapan y que hasta ahora es considerado como el más intenso en el historial sismológico del país.
En el Ejido Cuauhtémoc, del municipio de Jiquipilas, muchas viviendas están siendo reconstruidas, luego del paso del terremoto que dejó cientos de casas derruidas.
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Uno de esos inmuebles afectados por el terremoto del 7 de septiembre de 2017 fue el de la señora Amanda Robles, quien sufrió cuantiosos daños materiales, pues el sismo tiró sus paredes de adobe y el techo de barro colapsó en su totalidad.
Luego de perder su vivienda Doña Amanda tuvo que refugiarse debajo de unos árboles de mango donde colocó una lona y durante algunas semanas vivió en ese lugar improvisado. Fueron sus familiares quienes construyeron un techado de lámina donde colocó las pocas cosas que logró recuperar y vivió en ese espacio cerca de un año.
A tres años de la tragedia, se manifestó "muy triste porque ahí abajo de La Galera, lo pasamos los porrazos de agua, y nos llovía mucho y lo que hacíamos pues, estar ahí porque que más le íbamos a hacer, ni para dónde", relata doña Amanda.
En 2018, llegó una parte del apoyo del gobierno federal para la reconstrucción de sus viviendas, pero quedó a medias, por lo que tuvieron que irse a casa de un familiar y esperar a que les dieran otra parte de los recursos.
Ya en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se les prometió que la reconstrucción sería totalmente concluida y estaría a cargo de una empresa, que les haría las viviendas con una mayor resistencia para sismos.
Sin embargo, los trabajos de esa empresa se detuvieron desde abril pasado, en el caso de Doña Amanda, su vivienda ya cuenta con techo, paredes piso y dos cuartos para poder vivir de manera digna, por lo cual ya se mudó nuevamente a ese lugar aún cuando le faltan algunos detalles de puertas y ventanas, aunque espera que en tres semanas esté totalmente concluida.
"Estoy muy contenta, porque el licenciado Andrés Manuel nos sigue dando el apoyo y aquí estamos", indica doña Amanda.
Sin embargo, otras personas como Nahúm Toledo Ocaña, a pesar de tener folios donde se indica que su vivienda fue dañada y tendría el apoyo de la reconstrucción, hasta ahora, no ha recibido nada.
Nahúm cuenta a MILENIO que en 2017 llegaron personas del programa de reconstrucción del anterior sexenio y le indicaron que él sería beneficiado de forma total para su vivienda, ya que presentaba cuantiosos daños y derribaron lo que quedaba de ella.
"La verdad es que fuimos encuestados y nos dieron folios a muchos de aquí, pero no ha llegado el apoyo, llegó la maquinaria y derribaron las casas, y ahí están, ahí se quedaron y ya han pasado tres años y el apoyo no ha llegado", afirman Nahum.
Afirma que ha acudido a diferentes instancias gubernamentales tanto estatales como federales para obtener alguna respuesta al respecto, pero incluso le indicaron que ni siquiera aparece en la lista de los posibles beneficiados de la reconstrucción. Por este motivo, no tuvo otra opción que irse a la casa de su suegra.
"Ahorita estoy con mi suegra, mi terreno está pegado al de ella, y ahí estamos con ella, en un cuartito que es como bodega", dice.
Así como Nahúm, otras 20 personas del Ejido Cuauhtémoc continúan esperando el apoyo del gobierno federal para continuar con la reconstrucción de sus viviendas o incluso iniciarlas de cero, aunque muchos de ellos ya han perdido la esperanza de obtener el beneficio.
En Chiapas más de 46 mil viviendas resultaron con daños, de los cuales 14 mil fueron pérdida total en los municipios de Villaflores, Cintalapa, Arriaga, Jiquipilas y Tonalá, donde se concentra al menos el 70 por ciento de los daños. De los 124 municipios, 97 registraron afectaciones, y lamentablemente fallecieron 16 personas.
OMZI