Una de las prendas que llama la atención en la exposición Tlaqueparte, es justamente la guayabera yucateca; que hasta hace algunos años, estuvo en riesgo de perderse dentro del mercado de prendas en el mundo, por lo que incluso se llegó a pedir que se expidiera un certificado de origen que le diera un sustento a esta tradicional prenda yucateca.
Hecha de lino por manos artesanales del estado de Yucatán, a decir de Juan Carlos Maytorena Mendoza de Artemaro, al ser una prenda de vestir ancestral, los diseños se han tornado innovadores lo que ha logrado la aceptación de los jóvenes que reconocen el valor de portar esta camisa típica mexicana con orgullo.
“Ha crecido más la cultura hacia la guayabera, pero lamentablemente el mercado americano y europeo son los que valoran más este tipo de prendas”.
La guayabera ha tenido su auge en la historia de México. Sean de manga corta o larga, sus diseños muestran alforzas verticales con bordados y se fabrican en algodón, lino, seda e incluso telas sintéticas. Han sido parte de la vestimenta de presidentes como Luis Echeverría, José López Portillo, Felipe Calderón, entre otros.
“Ahora los jóvenes las están usando mucho, gracias a que los diseños son un poco más juveniles para ingresar a este mercado, cuyas ventas van a la alza, actualmente llega al 25% del mercado y no se pierda la tradición de esta prenda típica”.
En Yucatán son mujeres las que elaboran esta guayaberas, las que han formado una comunidad que radica en la entidad,
Fue Yayabera; ahora es Guayabera
A esta vestimenta se le conocía como “yayabera” debido a que se utilizaba en la zona del río Yayabo, no obstante al notar que los hombres campesinos solían almacenar guayabas en las grandes bolsas, se le renombró como Guayabera.
Portales de internet yucatecos cuentan la historia de la guayabera, que refieren que un hombre cubano pidió a su mujer costurera le confeccionara una camisa con los compartimientos adecuados para llevar en ellos “la fuma y otras cosillas”. De esta forma, elaboró una camisa de tela fresca con dos bolsas a los costados, generando un gran interés y demanda en la población.
EGO